Un billón cincuenta y siete mil ochocientos setenta y cinco millones trescientos cincuenta y cinco mil quinientos treinta y ocho pesos es la ambiciosa cifra del presupuesto que la Alcaldía de Cúcuta espera sea aprobado por el Concejo, en el actual periodo de sesiones.

De esta suma, 561 mil millones de pesos son de ingresos corrientes, de los cuales 206 mil millones de pesos corresponden a ingresos tributarios, es decir, los impuestos de los cucuteños.

Al igual que el año anterior, cuando la meta presupuestal era de 1.2 billones de pesos, todo indica que al final habría que recortarlo, según el concejal Oliverio Castellanos.

Para el concejal Bachir Mirep, también es “un poco alto, pues no debía pasar de 950 mil millones pero como hay unos créditos que empiezan a ser autorizados es normal que crezca en esa proporción”, dijo.

Sin embargo, según Castellanos. sí hay necesidad de ajustar el presupuesto “teniendo en cuenta que estamos en un plan de desempeño y que venimos con un déficit de 27 mil millones de pesos, del año anterior”.

Señaló que la administración debe responder cuánto se pagó del déficit en la vigencia anterior; cuál es el déficit actual; y cuánto se recaudó según la meta establecida.

También, afirmó que el concejo debe aprobar un presupuesto ajustado a la realidad fiscal de la alcaldía, y a la situación económica de la ciudad.

Advirtió que, según se avizora, “el año entrante no podemos esperar tantas obras como las de este año, que tampoco se cumplieron, porque no hay suficientes recursos”.

Aun así, la Alcaldía ratificó en su exposición de motivos la intención de dejarle a la ciudad “megaobras encaminadas al desarrollo”.

Vigencias futuras

En materia de vigencias futuras ordinarias, se prevé una apropiación superior a 24 mil millones de pesos, que incluyen proyectos financiados con recursos propios como el mejoramiento de parques, por seis mil millones de pesos; práctica de hábitos de vida saludable con ancianos, por 1.100 millones de pesos; pavimentación de barrios en la modalidad comunidad-gobierno, y mejoramiento de la red vial urbana, por 2.600 millones de pesos.

También se busca apropiar 8.500 millones de pesos de crédito para el proyecto de Cristo Rey.

Según los concejales Mirep y Castellanos, el proyecto no tendría problemas de legalidad, pero sí deja inquietudes.

“Se plantean incorporaciones en rubros que podrían endeudar el municipio”, dijo Mirep. “Pero son necesarios para dar dinamismo económico, si se sabe invertir y hay la debida planificación, servirán para salir del letargo económico”.

No opina lo mismo Castellanos, para quien el proyecto no es del todo conveniente, pues “no debemos seguir invirtiendo lo poco que nos presten en arreglar sitios turísticos que nadie va a visitar”, dijo. 

En este sentido, conminó a la alcaldía a atender la reparación de las vías, el despeje del espacio público, y las mejoras de infraestructura educativa y de salud, mientras Mirep indicó que “lo que no debe hacer el municipio es ser conservador porque podría ser peor, ya que aumentando el gasto público podría poner a circular recursos”.