La novela del Cúcuta Deportivo trae cada día un nuevo peldaño para una historia en la que los diferentes actores quieren hacer valer sus intereses. 

Esta vez, el Juzgado Tercero de Familia de Oralidad de Cúcuta decidió declarar nulo todo lo actuado en la tutela interpuesta por  Édgar Cortés, en la que el exmagistrado alegaba una presunta violación al debido proceso en la audiencia que decretó el inicio del proceso de liquidación judicial del Cúcuta Deportivo, el pasado 11 de noviembre. 

Cortés asegura que la delegada de la Superintendencia de Sociedades, debió tomar como prueba una carta en la que el presidente de la Dimayor, Fernando Jaramillo, afirmaba que estaba en estudio un adelanto de 1.500 millones de pesos para que el Cúcuta pagara parte de sus deudas. 

La decisión de declarar  la nulidad fue tomada por la solicitud que presentó la Superintendencia de Sociedades,  en la que pedía al juzgado la nulidad de todo lo actuado en la tutela ya que este ente “cumple funciones jurisdiccionales con categoría Juez Civil del Circuito, por tanto, las decisiones que esta autoridad administrativa adopta (…) deben ser revisadas por el Tribunal Superior de Distrito Judicial”, por lo tanto la tutela será remitida a este tribunal.

De igual modo, la solicitud también se hizo por falta de subsidiaridad, dado que Cortés lleva la misma solicitud ante la Supersociedades, que está en estudio. 

La institución fronteriza está representada por Arturo Acosta Villaveces, gerente liquidador delegado por la Supersociedades, quien está en la tarea de recuperar el reconocimiento deportivo ante el Ministerio del Deporte para luego buscar una reafiliación a la Dimayor. 

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De igual modo, la solicitud también se hizo por falta de subsidiaridad, dado que Cortés lleva la misma petición, de manera simultanea, ante la Supersociedades que aún no ha resuelto.