El equipo de la capital nortesantandereana inició con un tras pies, este fin de semana, su octava participación en fases finales de la liga colombiana de fútbol, desde su regreso a primera división en 2006. 

La primera vez que disputó esta fase fue en la apertura 2006, justo al año siguiente de coronarse campeón de la segunda división. En esa ocasión terminó segundo con 37 puntos en la fase de todos con todos, detrás del Once Caldas. 

Entró a disputar el grupo B, junto a Pasto, Millonarios y Atlético Nacional. El equipo dirigido por Jorge Luis Pinto estuvo cerca de llegar a su primera final y quedó segundo a 3 puntos de los de Nariño, que fueron primeros con 13 unidades y luego se proclamaron campeones.

Una fase histórica 

Aunque el primer semestre fue bueno, el segundo fue mucho mejor. Fue primero del grupo y obtuvo el campeonato. 

En la fase de todos contra todos, el rojinegro sumó 31 puntos y fue sexto.

Nuevamente se ubicó en el grupo B con rivales como Medellín, Millonarios y Huila. El fronterizo pasó a la final gracias a 10 puntos obtenidos en  tres victorias, un empate y dos derrotas. 

El 20 de diciembre en la capital musical de Colombia, los dirigidos por Pinto lograron su primer y único título en primera. Ganaron de local uno a cero y de visitantes empataron uno a uno. El marcador global fue de dos a uno.

El año de semis en Libertadores 

Gracias al campeonato logrado en el finalización 2006, Pinto partió a dirigir la selección Colombia. 

Su tocayo Jorge Luis Bernal asumió las riendas del vigente campeón para la época.

Bernal dirigiría la Copa Libertadores y tenía como responsabilidad, disputar el título en el  campeonato local. Los resultados en la competición internacional superaron las expectativas de la hinchada motilona. 

Con una excelente y recordada presentación, el Cúcuta caería en semifinales frente a Boca Juniors. 

En el campeonato local, llegó otra vez a la fase de grupos tras finalizar segundo con 33 unidades. Una vez más, fue al B con Huila, Millonarios y Medellín. 

El paso a la final se vio truncado pues el Huila fue líder con 11 puntos. Cúcuta alcanzaría 9 unidades. 

Para el finalización 2007, clasificaría quinto en la fase todos contra todos con 32 puntos. 

El equipo de Bernal iría al grupo A junto a Once Caldas, América y Atlético Nacional. Esta vez sumó solamente cinco unidades y fue último.

El regreso de Pinto 

En el año 2009, el estratega campeón regresaba al elenco motilón. 

Los rojinegros se clasificaron terceros con 31 puntos en la apertura.  Como si fuera habitual, el grupo B esperaba por el Cúcuta. Una discreta presentación lo dejó ubicado en tercer lugar con 6 puntos, superados por Cali y Junior con 9. 

Finales en la década de 2010 

Juan Carlos ‘Nene’ Díaz metería de nuevo al fronterizo en finales en el segundo semestre de 2010 tras ubicarse en el séptimo lugar con 28 unidades. 

Once Caldas, Quindío y Atlético Nacional fueron los rivales del Cúcuta en el grupo B. Los manizalitas ganarían el grupo con 13 unidades, cuatro más que los dirigidos por Díaz.  

El último registro 

En el apertura 2011, el Cúcuta superaría la primera fase al ubicarse octavo con 26 puntos. En ese torneo, debido al Mundial Sub 20 en territorio nacional, el sistema de campeonato cambió. 

Ahora las finales no serían por grupos, sino por enfrentamiento directos. 

Deportes Tolima fue el verdugo del Cúcuta con un marcador global de 4 a 2.

Un inicio dificultoso

En esta edición de la liga, los dirigidos por Guillermo Sanguinetti perdieron su primer compromiso en Medellín, frente al Atlético Nacional tres goles por uno.  

Junior de Barranquilla será su siguiente rival el jueves sobre las 7:00 de la noche en el General Santander. 

Luego enfrentará al Deportes Tolima el domingo 17 de noviembre, también en condición de local, sobres las 8:30 de la noche, según tiene programado la Dimayor. 

Los otros encuentros aún no están programados, pero el orden es el siguiente: Tolima en el Murillo de Toro de Ibagué por la fecha cuatro; Junior en el Metropolitano por la quinta fecha y Atlético Nacional en el General Santander.

Por: Gustavo Contreras Sabogal
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