Mientras países como Ecuador, Perú, Paraguay, Uruguay y Brasil ya retomaron competencias futbolísticas, el Fútbol Profesional Colombiano (FPC) aún sigue en vilo esperando fechas de regreso, formato y ciudades en las que se jugará.

El campeonato nacional se paró a mediados de marzo como medida de emergencia por la situación de la COVID-19 en el país. Desde hace cinco meses, no rueda el balón en ningún estadio colombiano y la espera se vuelve inquietante viendo el ejemplo del reinicio en los países vecinos.

“Estamos a la espera, queremos ejercer nuestro trabajo. Hoy es una incertidumbre el retorno pero creo que cada vez estamos más cerca de volver”, afirmó Jorge Artigas, técnico uruguayo que llegó al Cúcuta Deportivo en febrero.

Mientras la Dimayor y el Gobierno Nacional definen el rumbo de la liga, los equipos siguen entrenando.

El rojinegro lo viene haciendo desde el 25 de julio en las canchas del colegio Comfanorte, en Los Patios dividiendo el plantel de jugadores en tres grupos, pues así lo indica la fase de entrenamientos bajo riesgo que según los protocolos, debía terminar el 19 de agosto.

“El plantel está expectante, entrenando y esperando a que se habiliten los entrenamientos específicos y una fecha para el regreso. No depende de nosotros, por eso nos enfocamos en nuestro día a día”, comentó Artigas.

Lea También: 

Cúcuta Deportivo tendrá que pagar sus deudas para sobrevivir

Días antes de volver a los entrenamientos y una vez por semana, el plantel se realizó pruebas para identificar el coronavirus. En las primeras moleculares, un solo jugador salió positivo; en las serológicas, la primera de ellas arrojó cero casos pero en la segunda salieron tres positivos. El miécoles, el grupo se sometió a la segunda molecular, sin ningún positivo.

Pero el rojinegro, no solo se afana por el regreso sino también, en temas dirigenciales, por recuperar su reconocimiento deportivo y saldar sus deudas en el proceso de reorganización.

Al consultar al Ministerio del Deporte, dijeron que el proceso del Cúcuta sigue igual. El club apeló la decisión que lo obligaba a pagar 163 millones de pesos, según confirmó Nelson Parada, gerente del equipo.

“No nos preocupa como plantel. Confiamos en los dirigentes. Esperamos que ellos encuentren la solución. Obviamente la noticia llega pero nosotros no podemos hacer nada. Si nos desenfocamos en la nuestro damos ventaja”, afirmó  uruguayo.

En medio de todo este contexto, vale la pena recordar que hace dos semanas el plantel rojinegro paró de entrenar por tres días, por deudas en algunos futbolistas. Por ahora, les adeudan junio y julio.

 “Después de la para, el grupo regresó muy bien, con buen ambiente y buen trabajo. Nos gusta encontrarnos todos los días. Nos dedicamos a trabajar y encontrar la motivación diaria de cumplir y evolucionar como equipo. Planificamos el entreno diario buscando que el plantel se sienta bien”, añadió Artigas.

Bajo estas situaciones, se puede creer que los otros equipos del rentado nacional tienen ventaja pero Artigas afirma que no es así. “No hay ventaja de ningún equipo. Con las semanas que queda, no considero que alguno tenga ventaja porque todos estamos entrenando de manera individual. Hemos fortalecido ideas y temas tácticos y teóricos. Siento que estamos a la par e igual debemos demostrarlo cuando ruede el balón”.

Al consultar sobre sus sensaciones sobre todo lo vivido con el club, Artigas, quien ha dirigido tres partidos con el Cúcuta, aseguró estar  “contento con la ciudad y el equipo. Me siento amañado”.