Finalizado el año 2017, empiezan las actividades proselitistas con mucha intensidad. Se aproxima un nuevo proceso electoral, con factores y situaciones muy diferentes a los anteriores, con una percepción de que la mayoría de congresistas no han estado a la altura de las circunstancias a excepción de uno o dos. Con una dosis muy alta de corrupción según se dice entre el electorado de los estratos 1, 2 y 3, en los que se comenta van a pagar el voto algunos candidatos, inclusive se dice que con dineros del erario público, cosa que complica la situación y debilita mucho mas la Democracia, de por si, bastante maltratada con tanto escándalo que hemos vivido en estos últimos años, llevando con estos hechos a situaciones muy complicadas al país, pues es posible que estas malas prácticas abran las puertas a grupos indeseables, para que con el tiempo tomen el poder de la nación y las regiones con consecuencias peores que las que vivimos ahora.

Estas prácticas han dejado mal paradas las regiones, con representantes del pueblo y algunos gobernantes que solo ven el negocio en esta actividad, y no el desarrollo y progreso de la gente, las ciudades y el país. Para muestra, es ver como muchos de los actuales gobernantes municipales se han dedicado a otras actividades y no a generar progreso, a generar bienestar y a proyectar con visión sus regiones hacia un mejor futuro. Las ciudades como la nuestra se van quedando, y vemos como los problemas sociales, de orden público, descomposición social, pérdida de la infraestructura y otros problemas comienzan a destacarse y a ser el pan de cada día en una ciudad que espera y exige cambios positivos, de progreso y proyección hacia un desarrollo sostenible. De ahí la importancia de saber elegir, de tener conciencia si queremos tener buenos representantes que trabajen por la región, que exijan beneficios para la población y el departamento, que su gestión y esfuerzo se vea reflejado en un avance en la calidad de vida de los habitantes. 

Es muy lamentable y desalentador mirar atrás y ver como la mayoría de estos representantes del pueblo son completamente ajenos a la realidad, hasta tal punto que en las situaciones difíciles y de crisis, son los únicos que no vemos presentes ni sus opiniones se hacen escuchar, vuelvo y repito a excepción de uno o dos parlamentarios, a los que se les ve la intención de apoyar a la gente cuando se necesitan. 

Esta ciudad con una población del 80% compuesta por los estratos 1 y 2, y ahora con mas pobreza que antes, ya que como todos sabemos, el flujo intenso de Venezolanos con su pobreza a cuestas han complicado las cosas mas para Cúcuta, la que hace muchos tiempo ya, no disfruta de una abundancia, ni de una clase gobernante y dirigente diligente, comprometida y preocupada de verdad, con responsabilidad y sinceridad de hacer el trabajo para el cual fueron elegidos; da envidia ver a Bucaramanga en su progreso constante, ver al eje cafetero progresar cada día, ver otras regiones del país que prosperan y avanzan deja un sabor amargo y desazón al ver que acá nada mejora, todo sigue igual, con signos de deterioro en lo físico como la malla vial destruida, El Malecón en tinieblas, la inseguridad enorme, informalidad creciente, invasión del espacio público, formación de nuevos cinturones de miseria, para mencionar algunos de los tantos problemas que nos agobian, mientras que a algunos dirigentes y gobernantes no se les ve el mas mínimo asomo de interés por trabajar en la solución.

Desafortunadamente algunos elementos indeseables se han tomado el poder gracias al caldo de cultivo que es esta ciudad, debido a su enorme pobreza, falta de oportunidades y falta de visión de los mismos habitantes que terminan sucumbiendo ante miserables 50.000 pesos que se les da de limosna el día de las elecciones, permitiendo que personajes oscuros y otros incompetentes, con la intención de ¿qué? 

Creo que todos sabemos cual es la razón de la llegada al poder, dedicándose a inventar una serie de proyectos que para nada sirven, solo con el deseo de gastar sin fundamento, tal vez para con la intención de beneficiarse de los recursos que todos aportamos cada año para que la ciudad, el departamento y la nación se desarrollen con visión de futuro. Por eso en la medida en que el voto no sea consciente, pensando en un futuro próspero y con dirigente idóneos y el voto siga siendo manipulado con asistencialismo a la pobreza, con mercaditos y otras cosas, creo que vendrán personajes mas oscuros e incompetentes, aplazando así por largo tiempo, el progreso y el desarrollo de esta región dejada a la mano de Dios.