Los magistrados de la corte que lo investigan son amenazados; nueve, de los doce testigos que han hablado en su contra por la conformación de grupos paramilitares han sido asesinados. Ríos de sangre corren detrás de sus huellas. La sola mención de su nombre hace temblar a los más duros y feroces criminales. Sus antiguos aliados, aquellos con los que hizo fechorías, se fueron al exilio o están callados en algún país remoto.

Tiene más de 200 investigaciones pendientes en las que se le involucra con masacres, interceptaciones ilegales, narcotráfico, tráfico de influencias, cohecho y falsos positivos.

Se ha reunido clandestinamente con delincuentes a pesar de la investidura que ostenta. Le ha torcido el cuello a la constitución para su provecho personal. Sus más cercanos colaboradores aseguran que jamás duerme ni sonríe, que bebe una pócima extraña que le traen de las montañas de Sorte en Chivacoa, bajo el embrujo mítico de María Lionza y por eso ninguna enfermedad lo reduce. Otros afirman que un menjurje hecho con cera de abejas, 4 gotas de cedro, 2 de sándalo, 1 de eucalipto y 1 de cinamomo, y frotado sobre todo el cuerpo, este hombre se hace invisible para asistir a las reuniones de sus enemigos.

Un fotógrafo aficionado captó el momento en que este hombre misterioso e innombrable, se convertía en un mastín napolitano gracias a su capacidad para la trasfiguración. Allí comenzó su desgracia: al día siguiente perdió el apetito y el sueño y sucumbió a una fiebre mortal y a un vómito de sangre y su muerte fue dolorosa.

Todo el que lo mire a los ojos cuando está furioso siente una brasa viva en las entrañas y si no bebe un té de jengibre puede perder el juicio o quedar mudo para siempre.

Supongo que a estas alturas ya todos saben de quién estoy hablando. Se trata del protagonista de Noche Macabra, la última novela de Hermes Rafael Vargas, el escritor y traductor venezolano que por estos días visita la Feria Internacional del Libro de Bogotá. Hermes es conocido por sus versiones de Pessoa. Ahora se le conocerá por sus versiones de la realidad.