“Se ha aumentado de manera considerable la violencia sexual y la violencia contra la mujer”, dijo Hoyos al señalar que la Procuraduría apoyará este caso.

De hecho, esta semana la Procuraduría hizo un llamado de atención a las autoridades responsables para que se adelanten acciones concretas, eficaces y oportunas que garanticen la atención integral en justicia y salud a mujeres que han sido víctimas de violencia sexual.

Indicó precisamente que es la Comisaría de Familia, dada su condición de primera puerta de acceso a la justicia, la que está llamada a brindar servicios de información de manera integral pero que lamentablemente no se está haciendo el apoyo necesario sobre temas como la gratuidad de los servicios especiales que se necesitan para minimizar o evitar los efectos de la violencia sexual a nivel emocional, sicológico, físico, económico y laboral, y especialmente en materia de salud sexual y reproductiva.

“De la respuesta de 841 comisarías de familia se pudo establecer que mientras 827 despachos brindaron información sobre los servicios de atención psicosocial, 634 informaron sobre los medicamentos para prevenir el contagio de infecciones de transmisión sexual (ITS) y VIH Sida, y solo en 484 se brindó orientación sobre la interrupción voluntaria del embarazo”, señaló la entidad.