Desde Cartagena, el presidente de la República, Iván Duque Márquez, señaló que la sociedad ha venido “procesando” las tres causales de aborto permitidas por la Corte Constitucional.

Sin embargo, aseguró que despenalizar este procedimiento durante las primeras semanas sería “muy duro” para el país. 

“Soy una persona creyente y nunca he dejado de expresar mis opiniones  al respecto. ¿Cuál ha sido mi postura siempre? Soy una persona que creo en la vida desde la concepción, me he declarado siempre una persona provida”, agregó el mandatario.

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Duque aclaró que no pretende minar la independencia de la Corte, que espera discutir la próxima semana la ponencia que el magistrado de la Corte Constitucional, Alejandro Linares,  entregó a sus ocho colegas de la sala en la que dirime sobre las dos demandas que interpuso la abogada Natalia Bernal Cano sobre la penalización de esta práctica.

Bernal Cano considera que las prácticas abortivas aprobadas por el alto tribunal en 2006 y que se realizan en Colombia desde ese momento corresponden a tratos crueles, inhumanos y degradantes tanto para la mujer como para el feto. También considera que la vida se debe proteger desde el embarazo.

La Corte estableció en 2006 que las mujeres pueden realizar un procedimiento abortivo cuando la vida de la mujer esté en riesgo, el feto tenga alguna malformación o el embarazo sea producto de una violación sexual. Bajo estas tres causales el aborto no es penalizado en Colombia.

“La permisión del aborto, así sea en tres casos excepcionales, pone en riesgo la vida, la dignidad, la salud, la integridad física y psicológica tanto de la madre gestante como de su hijo o hija por nacer”, señaló Bernal en su demanda a la Corte Constitucional.

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El tema, que es sensible para el país, ha generado todo tipo de revuelo luego de que se conociera que una mujer en Popayán interrumpió su embarazo de manera voluntaria cuando tenía siete meses de gestación.

Entidades como la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) hicieron un llamado a la corte para que se prohíba el aborto en todos los casos, al considerar que se atenta directamente  contra la vida del ser humano concebido y no nacido.

Según Profamilia, alrededor del 94% de mujeres que abortan solicitan la interrupción de embarazo antes de cumplir 15 semanas de gestación, momento en el que los procedimientos son sencillos y rápidos.

La Center For Reprodutive Rights señala que 67 países del mundo permiten el aborto libre, a petición de la mujer durante las primeras semanas de gestación, término que oscila entre las 10 y 22 semanas.  La legalidad en esta práctica sería más efectiva para proteger los derechos de las mujeres y niñas que requieren acceder al aborto.