Seis reuniones con el Gobierno Nacional y siete movilizaciones por las calles del país no han logrado que el paro nacional, que adelantan los estudiantes de las 32 universidades públicas del país,  llegue a su fin.  

La discusión no ha cambiado desde el primer día hasta hoy. Las partes de la mesa de negociación discuten sobre el futuro financiero de la educación pública superior en el país. Los alumnos sostienen que hay un déficit histórico que alcanza los 15 billones de pesos. Además, insisten en que se requiere medio billón de pesos para terminar este semestre.  

Por otra parte, el Gobierno Nacional afirma que no hay más recursos de los ya planteados para los años venideros. El resultado se mantiene, el tire y afloja continúa dándose y en juego se mantiene el semestre académico.

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Para el rector de la Universidad Pedagógica, Leonardo Fabio Martínez, el proceso del paro ha sido un espacio para que el país discuta los temas “esenciales” de la crisis estructural de la educación superior pública en términos de financiamiento, sostenibilidad del sistema de las universidades a corto, mediano y largo plazo y la identificación de problemáticas más agudas.

“Los estudiantes tienen un espacio de una mesa de diálogo con profesores. Alí se han producido unas iniciativas y propuestas que están en discusión y es muy importante que a través de este espacio de interacción podamos pensar los problemas que nos aquejan y esa es una ganancia importante. Más allá de si llegan a acuerdos o no ese espacio es importante seguir potencializándolo”, sostuvo Martínez.

Durante los 50 días de paro, estudiantes, rectores y Gobierno han sostenido varias reuniones. Una de ellas logrando un acuerdo entre los 32 rectores de las universidades públicas y el presidente de la República, Iván Duque. El pacto consistió en que este periodo de gobierno, las transferencias de la Nación para funcionamiento de las instituciones de educación superior publicas crecerán según el IPC más tres puntos porcentuales en el año 2019. Desde 2020 hasta 2022 el incremento será el IPC cuatro puntos porcentuales adicionales.

Pese a esto, los estudiantes se mostraron en desacuerdo y afirmaron que, aunque esto mostró una voluntad política por parte del Estado los recursos continúan siendo insuficientes.  

Durante los diálogos, los voceros del Gobierno plantearon un aumento del presupuesto a la educación para los próximos cuatro años sobre la base Índice de Precios al Consumidor, IPC, más 3.5% para el próximo año, el IPC, más 4% para 2020 y 2021; y para 2022, 4,5% por encima de la base del IPC.  

A su turno, la líder estudiantil de la Universidad Nacional, Jennifer Pedraza, manifestó que el acuerdo con los rectores implica una adición a la base presupuestal de 500.000 millones de pesos constantes y resaltó que el Gobierno haya propuesto aumentar 36.000 millones de pesos adicionales, pero afirmó que se queda corto.

“Esas adiciones implican que nos habrían dado 536.000 millones de pesos a la base presupuestal de las universidades públicas. Pero algo que se olvida es que esto tiene que dividirse en 32 universidades públicas del país, es un avance importante pero insuficiente.  Sobre eso queremos hacer mucho énfasis porque hemos demostrado con nuestras ocho propuestas de donde puede salir la financiación a largo tiempo”, sostuvo Pedraza.  

La líder estudiantil indicó que una de las propuestas que ellos han planteado al Gobierno Nacional parte de la proyección de los recaudos de los impuestos que en teoría son para las universidades públicas. “No necesitaríamos otra reforma tributaria, sino que se cumpla lo establecido en la reforma pasada. Eso quiere decir que en los próximos años se recaudarían 5.3 billones de pesos que merecen las instituciones de educación superior y eso está sobre la mesa”, agregó la estudiante.  

Frente a esto, el rector de la Universidad Pedagógica, sostiene que el Gobierno debe entrar a analizar las propuestas que involucran beneficios a mediano y largo plazo como lo es la reforma a la ley 30, reforma al Icetex y Plan Nacional de Desarrollo.

“La firma del acuerdo entre rectores y Gobierno fue un primer paso, yo no lo veo como algo antagónico, sino que es un logro y ganancia de toda la comunidad universitaria. Ha sido algo complementario. Ese paso que se dio fue muy importante y ojalá que se pueda mejorar, se pueda pensar a corto, mediano y largo plazo y ahí los estudiantes también juegan un papel importantísimo”, resaltó el académico.  

Otro de los puntos de la discordia son los $700.000 millones que reclaman los estudiantes para Colciencias y una tasa real de interés en 0 por ciento para los créditos del Icetex.

Además, los voceros plantearon en la mesa que se requiere $1.5 billones para las instituciones técnicas y tecnológicas universitarias del país.

Ante la continuación del paro nacional distintas universidades públicas, como la Nacional o la Pedagógica, han anunciado que para solventar las ocho semanas de clase que quedaron congeladas por el cese de actividades, se debe retornar a las aulas el 14 de enero para ajustar los tiempos.