La búsqueda de Juan Camilio Bojorge Acevedo, de 9 años, quien desapareció el 24 de diciembre terminó de manera trágica: su cadáver fue encontrado por bañistas en las aguas del río Antón Moreno, afluente que separa Popayán de la localidad de Timbío, en el departamento del Cauca.

El triste hallazgo se dio en la tarde de este sábado cuando una familia payanesa adelantaba el típico ‘paseo de olla’ en este río. Una señora se bañaba en una parte profunda del afluente cuando pisó el cuerpo sin vida, creyendo que se trataba de un animal, avisó a las personas que en ese momento la acompañaban.

Entre los demás participantes empezaron a verificar qué era lo que yacía en la profundidad, topándose con una escabrosa sorpresa.

“Yo me metí al charco y empecé a nadar entonces con las piernas palpé algo blandito, me asusté mucho y grité a mi esposo creyó que era una culebra, entonces vinieron todos a ver y nos dimos que era un cadáver. Mi esposo se puso unas bolsas en las manos y sacó el cuerpo. Supimos así que era un niño muerto”, explicó Carmen Dorado, una de las personas que bañaba en el río Antón Moreno.

Los demás bañanistas aconsejaron al señor que dejara el cadáver a un lado del río y que avisara lo más pronto a la Policía. Fue así que los uniformados de esta institución llegaron al sitio, acompañados de la mamá de Juan Camilo para verificar qué clase de hallazgo era.   

La progenitora, sin importarle nada, atravesó el río y llegó hasta el punto donde estaba el cuerpo sin vida, comprobando que se trataba de su hijo, el mismo que esperaba encontrar con vida para entregarle su regalo de niño Dios.

"Qué me le hicieron al niño”, gritaba la desesperada madre mientras los uniformados de la Policía la retiraban del sitio, acordonarlo luego para que funcionarios del CTI de la Fiscalía realizaran las correspondientes acciones judiciales. Mientras esto sucedía, y al correr la voz de la muerte de Juan Camilio, familiares y amigos llegaron hasta este punto de la zona rural de Popayán para presenciar el trabajo de las autoridades.

De esta manera, terminaba la búsqueda de este pequeño payanés que cursaba segundo grado de primaria en la institución educativa República de Suiza y que era reconocido por sus amigos como una personita alegre y expresiva que gustaba jugar fútbol en la cancha del barrio Valladolid, donde reside la familia de Juan Camilio Bojorge Acevedo.

Ahora, y según la Policía, deberán esperar los resultados que entreguen los funcionarios de Medicina Legal de la necropsia y establecer las causas de la muerte de este niño y así continuar con las investigaciones que permitan esclarecer cómo murió Juan Camilo.

“Debemos esperar el informe de Medicina Legal para establecer qué fue lo que pasó, sería una imprudencia lanzar una versión sobre este caso. Por ahora, estamos reuniendo dinero y así ayudar a la familia para que le brinde cristiana sepultura al pequeño”, manifestó el comandante de la Policía en Popayán, coronel Pedro Rafael Rodelo.

Popayán | Colprensa