La palabra infierno parece quedarse corta para describir la situación por la que tuvo que pasar una mujer del área rural de Cimitarra por cuenta de su marido, quien la tuvo sometida ocho días con la amenaza de matarla si realizaba algún movimiento fuera de su casa.

La vida en pareja de esta mujer y su cónyuge comenzó hace unos seis años, tiempo durante el cual vivieron en una de las 35 veredas que conforman el área rural del municipio.

No obstante, fue la semana pasada cuando la convivencia se rompió de manera definitiva.

“El hombre le pegó a la señora en medio de una discusión que tuvieron... La relación ya venía deteriorándose.

Ese día, la mujer le contestó y amenazó con irse de la casa, argumentando que estaba aburrida ya de él”, relató la gestora de la Red de Mujeres del Magdalena Medio, capítulo Cimitarra, Cristina Madrid.

Según agregó la funcionaria, la determinación de la víctima de este caso terminó por enfurecer aún más a su marido, quien trató de agredirla con un machete.

“...De no ser por una de las niñas (tienen tres hijos) pudo haberla matado ese día”, explicó Madrid.

“Si se va la mato”

En un acto de valentía y en vista de que su marido había perdido los estribos y podía llegar a hacer cualquier cosa, la mujer trazó un plan y su primer tiro de dados fue bajar la guardia.

“Ella cambió el discurso desde ese día. Empezó a consentirlo, no lo bajaba de mi amor, lo calmaba, lo atendía..., buscando apaciguar la cosa, pero ella lo que estaba era muerta de miedo”, explicó la funcionaria de la Red de Mujeres.

Pese a la actitud asumida por la mujer, el labriego, quien cuenta con 34 años de edad, dos más que su compañera, no dejó la violencia a un lado y le dictó sentencia: “si se va la mato. Le meto candela a la casa con todos adentro”.

Pasaron ocho días que fueron como ocho meses para la afligida mujer, que solo pensaba en cómo salir de allí.

Finalmente, sin que ella misma lo supiera, unos jóvenes de una vereda vecina que por casualidad pasaron por la casa, notaron que algo extraño escondía esta relación y alertaron a las autoridades. Este jueves muy temprano Ejército, Policía y Red de Mujeres llegaron hasta la vereda Cortamedio y rescataron a esta mujer del infierno que vívía.