La captura del principal heredero criminal de la región de los Llanos, deja el camino libre para la expansión de la banda ilegal “los Urabeños” en el oriente de Colombia.

El general Rodolfo Palomino, director de la Policía, informó el pasado domingo que los Comandos Jungla arrestaron, en el municipio de San Martín (Meta), a Darío Andrés León Humanez, alias “Jonathan”, el presunto líder del Bloque Meta, la estructura que regula el bajo mundo en ese departamento, al igual que en Guaviare y Vichada.

Según el informe oficial del caso, días antes de su detención, este hombre tomó contacto con Dairo Úsuga David, alias “Otoniel”, el jefe de “los Urabeños”, a quien conocía desde los años noventa, cuando ambos delinquieron en el bloque Centauros de las Autodefensas.

“Informaciones de Inteligencia evidencian que ‘Jonathan’ fue contactado por ‘Otoniel’, quien le propuso que le vendiera el Bloque Meta y siguiera dirigiéndolo bajo una nueva directriz, la cual contaría con fortalecimiento estructural y armado, y así extender el dominio territorial (de ‘los Urabeños’) y tener el control de rutas de narcotráfico y laboratorios de procesamiento de cocaína”, dice el reporte.

Dominar los Llanos Orientales es un viejo anhelo de esa organización mafiosa. Según fuentes policiales, en 2013 envió 150 hombres para apoyar a la otra banda de la zona, Libertadores del Vichada, que comandaba Martín Farfán, alias “Pijarvey”.

Los hombres de refuerzo, sin embargo, comenzaron a extender su poder en la región, hasta reñir con las bandas locales. Para ello fue clave el conocimiento acumulado, pues “Otoniel” combatió varios años en la región.

La situación ya preocupaba a “Pijarvey”, quien en una interceptación telefónica -revelada por la Policía- les pedía a sus lugartenientes: “como vea usted a esos manes ‘urabeños’, voléeles sin compasión, déles duro a esos doble hp, son objetivo militar. Muévanse, que nos estamos dejando copar”.

Pero el cabecilla fue dado de baja por la Policía el pasado 28 de septiembre, en Vichada. Murió sin poder frenar a sus antiguos socios.

El poder criminal de los Llanos quedó entonces en manos de sus enemigos del Bloque Meta, pero ahora que también salió de circulación su comandante, el camino parece expedido para la expansión del clan de “Otoniel”, el más poderoso de Colombia, con redes en 17 departamentos y tres continentes, y cerca de 2.960 militantes. 

*Medellín, El Colombiano | Colprensa