El enfrentamiento entre el Gobierno y las altas cortes de la rama judicial se agudizó en las últimas horas. Este lunes, en el marco de la instalación del XXVI Encuentro de la Jurisdicción de lo Contencioso Administrativo, el presidente de la República, Iván Duque Márquez,  aseguró que “los fallos de las cortes se acatan, pero las fallas se discuten y corrigen”.

“Los fallos tienen sus alcances, los fallos tienen sus instancias. Nuestra Carta Política determina cuáles son los espacios para que se den las sanas controversias en la órbita jurídica, pero las fallas que se puedan advertir es un deber de todos corregirlas por el interés general del pueblo colombiano”, señaló el mandatario.

Duque agregó que hay que apelar a la Constitución como esa casa común que une a las instituciones para enfrentar otros flagelos  que atentan contra  el devenir del pueblo colombiano  y, particularmente, contra el  narcotráfico.

Según el mandatario, el narcotráfico ha sido un cáncer que ha atacado al país por décadas, pero que desafortunadamente entre 2015  y agosto del 2018  hubo una expansión exponencial.

El pronunciamiento del mandatario se produjo luego de que el presidente del Consejo de Estado, Álvaro Namen, señalara que en el Estado de derecho se separan los 3 poderes. Dijo que de una sentencia se puede discrepar, pero hay que acatarla, en respeto a  la independencia judicial.En presencia de magistrados y jueces, así como presidentes de las altas cortes, Namén tomó la vocería de la rama judicial frente a la controversia suscitada por el fallo de tutela de la Corte Suprema de Justicia en favor de las protestas sociales y la condena de los abusos y excesos de la fuerza pública.

“El Estado de Derecho separa los tres poderes y se basa en forma sustancial en el respeto de las decisiones al poder judicial. De una sentencia se puede discrepar y es posible controvertirla a través de los medios establecidos por el orden jurídico, pero hay que acatarla”, dijo Namén. “Colombia cuenta con una judicatura valiente y con coraje en la aplicación de la ley, imparcial porque juzga igual al poderoso y al humilde, e íntegra porque no se deja presionar ni amedrentar por nadie. “Es una sociedad democrática y republicana, en ella, las armas, la arbitrariedad y el abuso deben ceder ante el imperio de la justicia. Nos duelen todas las víctimas de los actos violentos, vengan de donde vengan”, dijo Namén.

La respuesta del presidente Duque fue directa y señaló que han acudido a herramientas constitucionales para dirimir las controversias.“Los fallos se acatan, pero las fallas se discuten y se corrigen. Los fallos tienen sus alcances, tienen sus instancias, nuestra carta política determina cuáles son los espacios para que se den las sanas controversias en la órbita jurídica”, aseveró.

Y sostuvo que su Gobierno respeta la protesta pacífica, sin permitir expresiones de vandalismo y violencia.“Lo decía usted, doctor Álvaro Namén, la importancia de los derechos. Los derechos son sublimes en una democracia, son vitales en una democracia, pero también es importante poner sobre la mesa los deberes, los deberes de todos, los deberes de los ciudadanos, los deberes de los funcionarios”, dijo Duque.