A pocas horas de cumplirse una semana de haberse instalado el quinto ciclo de negociaciones de paz entre el Gobierno Nacional y el ELN en Quito (Ecuador), la mesa parece no haber avanzado desde su reanudación, ni siquiera en la negociación del cese al fuego bilateral, considerado de vital importancia para continuar con los puntos planteados en la agenda.

Hasta ahora las delegaciones solo se han mostrado optimistas con el hecho de volverse a sentarse para negociar, luego de que el proceso permaneciera suspendido por cerca de dos meses, desde el 29 de enero por la escalada violenta del ELN cuando se acabó el primer cese bilateral.

El presidente Juan Manuel Santos, en su reciente visita oficial a Brasil, dijo que agradecía el apoyo de ese país y que esperaba que este conflicto se resolviera pronto. “No tienen otra opción, la opción sería continuar y ellos saben que el tren de la historia los dejaría sin ningún tipo de posibilidades. Yo estoy confiado de que perseverando como lo hicimos con las FARC también vamos a reintegrar este grupo”.

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Por su parte, el jefe del equipo negociador del Gobierno, Gustavo Bell, afirmó en una entrevista al Canal Institucional este miércoles, que la reactivación de la mesa de Quito “es una luz de esperanza, una oportunidad para avanzar en el desarrollo de la agenda, que tiene como fin último la finalización del conflicto armado con el ELN”, pero no hizo énfasis en los avances hasta ahora.

El ELN también ha estado activo en redes sociales con relación a la instalación del proceso, pero tampoco ha escrito sobre los avances en la agenda. “Este ciclo de conversaciones se logró instalar como producto de la voluntad que las partes mantienen para avanzar en el proceso. Los diálogos que hacemos en Quito siguen una agenda que es poner un final al conflicto armado”, escribieron.

Durante la instalación de la mesa el pasado jueves, que se extenderá hasta el 18 de mayo, el jefe del equipo negociador de esta guerrilla, Pablo Beltrán, dijo que espera que quien llegue a la Presidencia continúe con los diálogos y recientemente recalcó que el ELN busca una solución política al conflicto.

"El propósito es avanzar en la agenda lo más pronto posible para dejar consolidado este proceso y que los resultados de las elecciones presidenciales no lleven a que se interrumpa el trabajo desarrollado. Aspiramos a que cualquiera que sea el presidente que salga elegido el 27 de mayo, reciba de esta mesa unos avances que lo lleven a decidir que lo mejor es darle continuidad al diálogo. Esto porque, históricamente en Colombia, los procesos de paz avanzan con un gobierno y desafortunadamente el siguiente gobierno no les da la continuidad", dijo Beltrán en ese momento.

El guerrillero también invitó a quienes estuvieron en contra de la reanudación de los diálogos a participar en su construcción. “Es de especial interés del ELN que todos los sectores de la sociedad colombiana se integren a la participación para lograr la paz de Colombia. Esto significa un llamado a los que pidieron el reinicio de estos diálogos, pero también a quienes se opusieron a que esta mesa se reanudara. Esperemos que cambien de opinión y que vean que la paz es una oportunidad para Colombia”.

Por su parte, Gustavo Bell, jefe del equipo negociador del Gobierno, señaló que una de las prioridades de este ciclo es evaluar los errores del pasado cese al fuego bilateral y construir uno mejorado. "Este cese tuvo sus defectos, pero todos coincidimos en que fueron más sus aspectos positivos que negativos. La tarea es evaluar precisamente esos aspectos negativos y positivos para darle continuidad y corregir las falencias que pudo haber tenido para construir un cese al fuego más estable que nos permita avanzar en el desarrollo de los otros puntos de la agenda", indicó.

El representante del Gobierno agregó que tiene optimismo en los avances que se puedan dar en este ciclo y que por esta razón, esta etapa es más larga que las cuatro anteriores, y aseguró que en esta etapa se construiría una metodología de participación de la sociedad, el pacto del nuevo cese al fuego y en lograr un acuerdo humanitario para el Chocó.

Sin embargo, en el reciente informe sobre derechos humanos de la ONU, se incluyó al ELN como uno de los grupos que ha contribuido a la escalada de violencia en ciertas zonas del país.