En una carta publicada en su cuenta de Twitter, el exjefe de las Farc, Iván Márquez, vuelve a cuestionar el proceso que se sigue contra Jesús Santrich, aunque advierte que “mi propósito no es molestar a nadie con este análisis, sino llamar a la reflexión sobre este caso concebido de manera torcida para dañar la paz de Colombia”. 

Se trata de un documento de dos páginas titulado ‘Ahora hay que liberar la paz’ y fechado del 7 de junio, pero divulgado en su cuenta en las últimas horas. Márquez plantea una serie de cuestionamientos sobre los señalamientos al representante a la Cámara sobre sus presuntos nexos con el envío de un cargamento de 10 toneladas de droga a los Estados Unidos. 

“¿Cuándo y en qué laboratorios la procesó? Sus escoltas policías que los acompañaron desde que llegó a Bogotá desde La Habana debieron darse cuenta. ¿Por qué no les preguntan? Ellos si conocen el día al día de la agenda política del calumniado”, dice en uno de los párrafos de la misiva. 

Márquez actualmente se encuentra en problemas jurídicos y políticos por cuentas de las decisiones de la Jurisdicción Especial para la Paz y del Consejo de Estado. En el tribunal de paz se iniciaron los trámites para abrirle un incidente de incumplimiento debido a varias inasistencias ante esa instancia para que rindiera sus versiones como quedó pactado en los Acuerdos. 

Y en la alta Corte se estudia la posibilidad de decretar su muerte política dado que no se posesionó como senador lo que llevó a la Mesa Directiva de esa corporación a instaurar una demanda para que se definiera su futuro. La decisión se estaría tomando en unas dos semanas. 

Aunque nadie sabe dónde está, Márquez sí ha sido muy constante en la ya citada red social. De hecho, los mensajes que ha publicado en Twitter también sirven de base para que los magistrados de la JEP analicen su situación ante el tribunal ya que se ha ido lanza en ristre contra el proceso del cual fue negociador al punto de insistir que fue un error haber entregado las armas.

Pero en esta nueva carta, el mensaje de Márquez parece apuntar a otra línea. “Se puede vencer la mala energía que propagan los enemigos de la paz y la verdad. Hay un sin número de almas buenas desconocidas que desean con todas las fuerzas de su corazón el triunfo sobre el odio y la venganza”, añade. 

En las dos páginas también señala que “hay gente que le tiene miedo a la verdad y a que se conozca su gran responsabilidad en el conflicto”.