Que se haya quedado sin voz no ha sido impedimento para que la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, persista en el propósito de dialogar con los líderes de la minga indígena que ya completa catorce días en el norte del Cauca.

Eso sí, repite casi que automáticamente el inamovible del Gobierno Nacional: no llegará a sitios donde haya carreteras bloqueadas.

Por eso, dice, el viernes sí se logró un acuerdo con los miembros del pueblo Misak, que desde el miércoles 13 adelantaba una protesta pacífica en el sitio La María, perteneciente al municipio caucano de Piendamó.

“Hemos insistido en que es necesario levantar los bloqueos, continuar con la negociación y revisión de la implementación del Plan Nacional de Desarrollo y ya después miraremos la fecha o la venida del Presidente”, explica, en cambio, sobre la concentración mayor de indígenas que, tras once días, persiste en el Pital, Santander de Quilichao.

Durante los últimos días usted ha ido y venido de la zona de la minga. ¿Cómo le fue el viernes?

En la mañana estuve en Popayán, con el pueblo Misak, con una organización que se llama Aiso, que son los otros pueblos del Suroccidente, porque ellos querían el reconocimiento de su organización y ya se firmó. Ellos estaban en una protesta pacífica en el sitio La María, sin bloqueo, y por eso logramos firmar. En la tarde, regresamos a Santander de Quilichao, donde el Alto Comisionado para la Paz adelantaba la Mesa de Garantías de los Derechos Humanos, donde una de nuestras solicitudes fue precisamente el levantamiento de los bloqueos.

Pero entonces finalmente se logró avanzar en la instalación de una mesa técnica en un punto distinto al que ellos exigían...

Efectivamente, el jueves logramos reunirnos en un sitio donde no hay bloqueos, en Santander de Quilichao, y allá volvimos el viernes en la tarde, siempre con nuestra solicitud de que se levanten los bloqueos.

El Ministro de Defensa le pidió a la guardia indígena que entregue a quien le disparó al policía que murió el martes en la zona. ¿Ha habido una respuesta de parte de los líderes de la minga?

El tema estaba pendiente de ser tratado en la Comisión de Garantías, pero lo que ellos han dicho es que no tenían claridad en el tema.

Aunque usted ha estado casi desde el primer día de la protesta, esta semana se vivió la mayor tensión en El Pital. ¿No sintió miedo?

No. Primero que todo, yo soy una persona de muchísima fe y siempre estoy segura de la protección de Dios y, en segundo lugar, se había conversado previamente que ingresábamos con el acompañamiento de Naciones Unidas, MAP-OEA, la Defensoría del Pueblo, y ellos eran garantes de nuestra integridad, razón por la cual no tuve preocupación.

En Popayán hay mucha preocupación por las consecuencias que el bloqueo de la vía pueda generar de cara a la próxima Semana Santa. ¿Qué respuesta hay para eso?

El miércoles en la tarde estuvimos reunidos con los gremios y los comités intergremiales del Cauca, del Valle del Cauca y de Nariño y todos tres manifestaron esas preocupaciones, especialmente por el bloqueo de la Vía Panamericana en el Cauca de cara a la Semana Santa, pero esperamos que de aquí a allá se hayan levantado los bloqueos y ya tengamos estabilizada la región.

Para este domingo se ha anunciado un acto de protesta de los indígenas en Cali. ¿El Gobierno puede asegurar que no se permitirá que aquí suceda algo parecido a lo que ocurre en el norte del Cauca?

El viernes en la mañana estuvimos reunidos con la Gobernadora del Valle del Cauca, que tenía su Consejo de Seguridad, y me mostró las actas en las que las organizaciones indígenas se comprometieron a hacer una protesta pacífica, sin bloqueo de vías, y obviamente, todo el Estado, la Fuerza Pública, está muy pendiente de garantizar que no se vaya a dar ese bloqueo.

Ministra, la pregunta del millón: ¿hasta cuándo durará el bloqueo?

En este momento seguimos dialogando en Santander y esperemos que podamos sacar adelante esta situación.

¿Pero hasta dónde va a llegar el Gobierno, cuál es su propuesta para tratar de solucionar la situación?

Nosotros siempre hemos estado abiertos al diálogo, ahora queda definir las rutas para la implementación del Plan Nacional de Desarrollo, una vez se apruebe en el Congreso de la República, y de ahí depende que puedan ellos tener solución a las demandas que tienen de Gobiernos anteriores, inclusive con incumplimientos, pero nosotros les pedimos que se levanten los bloqueos. Respetamos la protesta, siempre y cuando no se causen perjuicios a terceros que no están vinculados a ella.

¿Pero los indígenas siguen exigiendo que el presidente Duque haga presencia en la zona?

Nosotros hemos insistido en que es necesario levantar los bloqueos, continuar con la negociación y revisión de la implementación del Plan Nacional de Desarrollo y ya después miraremos la fecha o la venida del Presidente.

¿Ante el poco avance de las conversaciones, no se ha pensado en buscar una tercería que ayude a acercar a las partes?

Es que hemos tenido todas las comisiones de facilitación. Inicialmente fueron los cuatro gobernadores: el del Cauca, la Gobernadora del Valle, el de Nariño y el del Huila. El presidente Duque autorizó que fueran y ellos hicieron unos acercamientos, de igual manera el Congreso de la República, los obispos, es decir, aquí no ha faltado voluntad de parte del Gobierno para adelantar la conversación, lo que pasa es que no se puede tomar una decisión con bloqueos, porque eso indiscutiblemente genera vías de hecho que no son aceptadas por el Gobierno.

¿Qué opinión le merece la tragedia ocurrida en Dagua, donde nueve indígenas murieron por una explosión en un resguardo indígena?

Es lamentable lo que ha ocurrido, la investigación orienta a que se venía manipulando artefactos explosivos y esto causa esta tragedia. Una vez más se demuestra la necesidad de tener cordura en estas protestas y mantener unos estándares de respeto a la vida de los demás.

¿Y se ha podido establecer alguna relación entre esos hechos y la minga en el norte del Cauca?

No, directamente. Hay que esperar el resultado de la investigación.

¿Pero el tema va a ser tocado en la mesa de negociación?

Claro, nosotros rechazamos todas las ilegalidades que se presentan por la manipulación de explosivos, son delitos y por eso hay un riesgo grande sobre la población, y las autoridades actúan para judicializar a quienes incurren en esos delitos.

Ministra, ¿usted no debería estar defendiendo el Plan Nacional de Desarrollo en el Congreso, cómo vio el tira y afloje que se vivió estos últimos días en el Legislativo?

Lo que ocurre es que somos un equipo de Gobierno único y el Plan Nacional de Desarrollo lo lidera la Directora de Planeación Nacional, el Ministro de Hacienda y el Viceministro del Interior, quienes, con todo un bloque del Gobierno, estaban pendientes de que el proyecto saliera adelante, sin que fuera necesaria mi presencia, pero ya para la plenaria sí espero poder estar participando de la discusión del Plan.

¿O sea que su plan es pasar el puente en Cali atendiendo las conversaciones con los indígenas?

Me vine a vivir al suroccidente del país. Me la he pasado entre Cali, Popayán y Santander de Quilichao, pero ese es el trabajo de los ministros, estar en todo el territorio nacional y aquí estoy, dispuesta a pasar el puente, no disfrutando Cali ni Popayán, pero trabajando con la gente, que es lo que me corresponde.