La guerrilla de las Farc no descarta la posibilidad de que el gobierno de Estados Unidos permita que Ricardo Palmera, llamado Simón Trinidad, participe de la firma del acuerdo final de paz.

En rueda de prensa en La Habana, Cuba, el jefe negociador del grupo subversivo Iván Márquez confirmó que en marzo pasado le fue planteado el tema al secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, cuando visitó la isla con el presidente Barack Obama, para restablecer las relaciones diplomáticas con Cuba, y se reunió con la delegación de paz de la guerrilla.

“El señor Kerry nos dio una esperanza, nos dijo que conocía suficientemente el caso, que iba a analizarlo, que se abría una posibilidad, pero la respuesta fue positiva y no la olvidamos, pero no voy a entrar en detalles”, dijo Márquez.  

Explicó que “la presencia de Simón Trinidad es importante en este escenario por razones políticas y humanitarias. Uno no puede estar condenado injustamente”.

Iván Márquez agregó que si en Colombia se están dando pasos en la dirección correcta hacia la paz, hay que replantear esquemas mentales y propiciar salidas y soluciones a los problemas. Conversando es como se encuentran fórmulas de salida. Por eso explicó: “Esperamos un sí, es más fácil convertir un no en sí que un sí en no”.

Por su parte, otro negociador de las Farc, Pablo Catatumbo, le respondió al expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien dijo la víspera que “la paz está herida”, al rechazar el acuerdo de cese el fuego. “La paz no está herida, sino fortalecida, la que está herida es la guerra y las salidas guerreristas”.

Catatumbo también explicó el acuerdo al que se llegó con el Gobierno Nacional en materia de lucha contra el paramilitarismo: “hicimos un compromiso para que nunca más se revuelvan armas y política. El paramilitarismo le ha mucho daño a Colombia. Si no logramos desmontar esas estructuras, este proceso puede fracasar”.

Sobre ese punto específico en el acuerdo revelado ayer, Catatumbo, jefe del bloque suroccidental de las Farc, dijo que incluye que el Gobierno promoverá leyes que incorporen a la Constitución Política la prohibición de la promoción del paramilitarismo.

“Acordamos crear una unidad especial de investigación que forme parte de la Fiscalía, pero con independencia para investigar todos los crímenes del paramilitarismo”.

Sobre el tema de las garantías de seguridad, Catatumbo explicó que el acuerdo no es solo para proteger a los guerrilleros que se desmovilicen y quieran hacer política sin armas, sino también para los líderes sociales, los reclamantes de tierras y los defensores de derechos humanos.

Bogotá  | Colprensa