A partir de este 1° de septiembre comenzará la expedición del pasaporte electrónico (con chip integrado), en todo el país. La medida se toma teniendo en cuenta que desde el próximo 24 de noviembre el pasaporte convencional perderá validez.

Desde esa fecha, quien desee salir del país deberá portar ya sea el pasaporte electrónico o el de lectura mecánica. Las tarifas para la expedición del documento también cambiarán.

Desde la oficina de pasaportes, se cree que el nuevo precio será de $244.600, o sea $20.000 más. No obstante, están a la espera de lo que diga la Cancillería.

La canciller María Ángela Holguín explicó que el incremento en los costos se presenta por la nueva tecnología con la que contarán los pasaportes y que son requeridos para ingresar a la zona euro con la eliminación de la visa Schengen.

Holguín también recordó que los ciudadanos que hayan realizado la solicitud del pasaporte, pero que no hayan pagado antes del 31 de agosto, a partir del primero de septiembre pueden reliquidar la solicitud para aplicar el pago con la tarifa actualizada y proceder a la autorización normalmente.

A continuación, le explicamos cuál pasaporte perderá validez y cuáles son los cambios implementados en el nuevo documento.

El pasaporte convencional perderá validez el 24 de noviembre de 2015 y dejó de expedirse desde el 2010. Este pasaporte tenía la foto pegada en una hoja plastificada.

El pasaporte de lectura mecánica tiene una validez de 10 años. Se reconoce porque tiene una lámina de siete capas de policarbonato en la que está impresa una fotografía a blanco y negro del titular.

Este pasaporte tiene un código de barras con información encriptada del titular y también es válido para ingresar a los países de la comunidad europea como el pasaporte electrónico.

El pasaporte electrónico, que se expedirá a partir de este martes, se podrá identificar porque en la carátula tiene un ícono de chip grabado en la parte inferior que lo identifica como tal. El chip contiene información biográfica y biométrica que completa la seguridad del documento y permite validar que el viajero es el titular de la libreta como es el caso de la fotografía y huellas digitales.

Cali | El País