“El agua no es liberal ni conservadora, ni de derecha ni de izquierda, el agua es un derecho de los colombianos”, aseguró el procurador  de la Nación Fernando Carrillo Flórez, ayer durante la inauguración en Santa Marta de la Planta de Tratamiento de Agua Mamatoco.

Carrillo Flórez se refirió a la importancia de que el país se tome en serio la agenda ambiental, que tiene estrecha relación con el derecho al agua, el respeto por los Planes de Ordenamiento Territorial (POT) y la forma como estos se deben ajustar a fenómenos como el cambio climático.

“El tema del agua es ignorado en la agenda pública de este país. Está comenzando a ser considerado precisamente por los efectos que está generando o ¿qué creen ustedes que pasó en el caso de Mocoa? Simplemente una indiferencia frente a los gritos de la naturaleza, que fueron muchos y que fueron desatendidos”, añadió. Señaló que los mandatarios locales tienen una alta cuota de responsabilidad, así como las Corporaciones Autónomas, que en su criterio han sido presas en los últimos tiempos “de la politiquería”.

Sobre la vigilancia del recurso del agua en el departamento del Magdalena, el procurador sostuvo que “(…) estamos hablando de la Ciénaga Grande, de unas reservas acuíferas, de cuencas hidrográficas que tienen que ser respetadas, y por eso es tan importante que la visión que se tenga de aquí en adelante no sea únicamente la visión de un recurso tan importante como el agua, sino de todo el desarrollo ambiental de esta ciudad, de este departamento y de esta región”.

El jefe del Ministerio Público llamó la atención en el sentido de que lo “público es de todos y hay que defenderlo”, y para el caso de la capital de Magdalena, con la nueva planta de aguas, pidió una presencia efectiva de las autoridades, partiendo de la alcaldía, la gobernación y Cormagdalena. “Entiendo que en la crisis del agua de Santa Marta el elemento del cambio climático ha sido fundamental, pero aquí han creído que el cambio climático es una locura inventada por unos excéntricos que vienen a decir lo que se presenta en otras latitudes, pero que no nos afecta directamente a nosotros. Gran mentira por supuesto”, dijo.

Aseguró que pese al paso que da la ciudad, el ente de control mantendrá su vigilancia y el monitoreo sobre “el derecho al agua de los samarios”, por lo que pidió a la alcaldía que preste un servicio de manera efectiva, con “eficiencia ejemplar, probidad, integridad y rendición de cuentas”.