El presidente Iván Duque Márquez denunció este lunes que “hemos visto la presencia de células de Hezbollah en países como Venezuela, con la anuencia y la connivencia de la dictadura de Nicolás Maduro”, al asegurar que América Latina ha sido afectada por el terrorismo y se ha observado el accionar de diferentes organizaciones criminales transnacionales.

Durante la instalación la III Conferencia Ministerial Hemisférica de Lucha contra el Terrorismo, en la que participaron delegados de más de 25 naciones, el jefe de Estado recordó que muchos países del hemisferio se han visto afectados por el accionar de estos grupos criminales, y pidió a los asistentes a que el encuentro sirva para “adoptar todas las resoluciones emanadas del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas”.

Se refirió, explícitamente, a la Resolución 1373 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, la cual –explicó- “es muy clara y contundente en que no se puede permitir a ningún Estado que promueva, que albergue, que patrocine o que facilite actividades terroristas en su territorio”.

Insistió en que los países que violan esta Resolución y que incurren en estas prácticas que favorecen a las organizaciones terroristas “merecen ser sancionados, denunciados y merecen, además, que esa reacción sea una reacción de manera colegiada, a través de todos los foros multilaterales posibles”.

Por esta razón, enfatizó que “para nadie es una mentira que aquí en el hemisferio estamos viendo claramente esas violaciones” y comentó que “la tiranía y la dictadura de Nicolás Maduro alberga en su territorio a grupos terroristas, como el Eln y las disidencias de las Farc”.

Dijo que son grupos que “están reclutando niños, traficando armas y que están planeando ataques contra distintas comunidades; que están fraguando atentados contra líderes sociales y que, adicionalmente, están participando en grandes redes internacionales de narcotráfico para favorecer a sus estructuras y también a sus cómplices en la dictadura”.

A renglón seguido, llamó a la reflexión y manifestó que “eso nos tiene que llamar a todos a la acción”, y si bien reconoció que “hemos dado pasos muchos de los que estamos acá, en el marco del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca”, insistió en que “más allá de las acciones que estén dentro de ese protocolo, esta reunión hemisférica tiene que servir para que, categóricamente, nos refiramos a que ningún Estado en la región puede cabalgar sobre esas premisas de ilegalidad de manera impune”.

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