Los días de libertad del reguetonero Alberto Stylee parecen haber acabado, al menos por los próximos 10 años. Con la sentencia del Tribunal Superior de Medellín, que lo condenó por los delitos de tentativa de homicidio y porte ilegal de armas, el cantante tiene una orden de captura en su contra y está siendo buscado por la Policía.

Aunque, Carlos Alberto Pizarro, nombre de pila de Stylee  —señalado de asesinar a Edwin Alfredo Henao Moná— fue absuelto en primera instancia por un Juez Municipal de Bello, en octubre del año 2013, en las últimas horas el Tribunal revocó la absolución que había recibido el reguetonero puertorriqueño.

En ese entonces el juez adujo duda probatoria, decisión que fue apelada por la Fiscalía y el representante de la víctima.

Hoy, tras la sentencia dictada, a Stylee le espera la audiencia de individualización o lectura de sentencia, programada para el próximo 24 de febrero, y durante la cual tres magistrados decidirán el monto de la pena.

Si bien no se conoce la cantidad de años que el cantante permanecerá en la cárcel, los cargos que se le imputaron dan una pena estimada en 17 años de prisión.

Dudan de su paradero

Aunque el abogado del artista, Héctor Pinzón Gómez, aseguró que Stylee se encuentra en su casa, a la espera de la audiencia, la familia y el representante de la víctima dudan que el acusado se encuentre en Medellín.

Según José de Jesús Díaz, abogado de la víctima, el reguetonero se ha mostrado ajeno al proceso y ni siquiera se presentó al juicio. Por eso prepara recursos internacionales, en caso de que no se acoja a la justicia colombiana.

“Insistiremos para que en caso de que no se entregue, de aquí a la sentencia, se decida la captura internacional. Eso es una orden de Circular Roja de Interpol”, explicó.

Para Díaz, ha habido incoherencia en las declaraciones entregadas por la defensa de Alberto Stylee, que inicialmente dijo que este se encontraba en Puerto Rico y luego que permanecía en su apartamento.

“Tiene orden de captura y de migración Colombia para que no salga del país. Cualquier funcionario de Policía puede capturarlo”, indicó Díaz.

Lo que enredó a Stylee

La prueba más fuerte aportada por los representantes de las víctima y la Fiscalía fue el mismo testimonio de Edwin Alfredo Henao Moná, que fue herido de bala a principios de 2012, mientras estaba en una finca en el municipio de Copacabana.

Edwin, que luchó contra las lesiones generadas por el disparo y dos años después murió, fue llevado meses después del ataque, en ambulancia, hasta una sala de justicia en Girardota. Allí, en una camilla, atendido por una enfermera y acompañado por su familia, reveló al Juez que Stylee le había disparado y no hizo nada para que fuera atendido.

*Medellín | Colprensa