Cientos de defensores del acuerdo de paz con la extinta guerrilla de las Farc y de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), se dieron cita desde las 5:00 de la tarde de este lunes en diferentes puntos de las ciudades principales, para rechazar las objeciones que hace algunos días hizo el presidente Iván Duque a seis puntos de la Ley Estatutaria de esta jurisdicción. 

La representante a la Cámara por el Partido Verde, Juanita Goebertus, una de la líderes de la marcha, sostuvo que los convocantes estaban contentos por la acogida de la ciudadanía, en especial porque estaban representados distintos sectores de la ciudadanía. Añadió que no fue un escenario de partidos  políticos sino de país. 

Por su parte, Claudia López, quien aspira a la Alcaldía de Bogotá, señaló: “somos una nueva generación, queremos una vida para la paz y la reconciliación. Ni un día más para el rencor y la división, doblemos la página, entendamos lo que cada uno ha vivido, su dolor, su perspectiva, y desde esa diversidad construyámonos como Nación”.

El senador Antanas Mockus agregó que es doloroso que en nuestro país sean muchos quienes todavía no se han percatado de la proeza que significa la paz. 

Por su parte, la vicepresidente de la  República, Marta Lucía Ramírez, señaló que sí hay un trasfondo político detrás de esta. Dijo que el compromiso con Colombia se demuestra en no dejar aprovechar este momento de confusión por cuenta de las objeciones que hizo el presidente a la JEP para hacerle pulso.

“No soy no soy partidaria de que se utilice la confusión ciudadana para salir a generar una movilización que tiene por objeto, en algunos actores políticos, poner al Gobierno contra la pared. Este pulso con el Gobierno es un pulso que nos daña a todos, que daña muchísimos a muchas de las comunidades”, señaló.  

De acuerdo a los convocantes, la marcha se hizo con el propósito de seguir abriendo espacios para la consolidación de la paz, porque consideran que es obligación de la ciudadanía defender y proteger el logro de la paz. 

Los marchantes también hicieron un llamado a la comunidad internacional, y en particular a los países garantes del proceso de paz, para que acompañen el clamor ciudadano de que se cumpla lo acordado en La Habana.