Centenares de personas observan desde la parte alta de una curva, de la llamada ‘Nariz del Diablo’, el deslizamiento de tierra que se llevó un carro tipo aerovan, donde viajaban 13 personas, entre ellos tres menores de edad.

La gran mayoría son habituales viajeros de este peligroso tramo, quienes en silencio recuerdan las historias que se cuenta de este sector de unos 30 kilómetros, que empieza en el municipio de Túquerres y termina en el sector de Piedrancha, municipio de Mallama, en Nariño.

El frío que carcome los huesos, pero cambia de un momento a otro en esta vertiginosa bajada, donde en las mañanas se pasa de los 5 a los 15 grados en 30 minutos y se muestra como un trampolín, donde la montaña fue abierta a pura fuerza por el centro, para dar paso a la vía que lleva a Tumaco.

La parte alta de la curva es todavía más frágil y se mueve aún más cuando llueve, desde la baranda de protección se contabilizan unos 300 metros hacia el fondo del abismo entre un empedrado, donde los conductores lo llaman ‘el cementerio de carros’, porque son varios los que han pasado derecho en este desfiladero, que recuerdan las centenares de farolas que han dejado los conductores en una pequeña gruta ante la imagen de la virgen de Las Lajas, en señal de agradecimiento por no sufrir accidentes.

Pero, pocos metros más abajo, donde todos creen que es seguro, la tierra escurrió de lo alto el sábado a las 3:00 de la tarde, en medio de un cielo gris pero sin lluvia, y se llevó el carro de la empresa Supertaxis, con 13 almas a bordo.

El ruido del metal retorcido que escucharon algunos vecinos, lo confundieron con el de las vallas de protección, nunca creyeron que se trataba de un vehículo. Fue tanta la cantidad de piedra y tierra que se deslizó, que no dejó huella de las víctimas, solo unas horas después se percataron de lo que había sucedido.

El desespero de algunas personas que presagiaban lo peor, ya que sus familiares habían tomado el automotor se servicio público en Piedrancha, unos minutos antes del deslizamiento, hicieron que bajaran hasta el precipicio y observaran que un brazo sobresalía de la tierra, hecho que permitió de inmediato activar las alarmas y posterior búsqueda de los fallecidos.

Labores de rescate

Unas 50 unidades del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de los municipios de Mallama, Túquerres e Ipiales, y del casco urbano de Piedrancha, con apoyo del Batallón de Ingenieros del Ejército y Policía Nacional se hicieron presentes para las labores de rescate.

El domingo fueron hallados los trece cuerpos y este lunes se realizó un barrido para verificar que no hubiera más. “No hay certeza del número de pasajeros que viajaban; el cupo del carro era de 16 personas, por eso creemos que posiblemente fueron expulsadas 4, es necesario hacer un rastreo de la zona para descartar más víctimas”, dijo Lenin Tarapués, del Cuerpo de Bomberos de Túquerres.

Hacia el medio día del domingo fue encontrado el vehículo unos 100 metros más abajo de la vía, las latas retorcidas dan cuenta de la violencia con la que fue embestido. “Hemos descartado que otros carros hayan sido arrastrados, de igual manera ciclistas”, dijo Lenin.

Listado de víctimas

- Lizet Constanza Estrada Rosas, de 20 años de edad, oriunda de la vereda Guaisés, del municipio de Mallama.
- María Camila Velásquez Rodríguez, de 19 años de edad, su esposo Romario Cabezas Cortez, de 23 años y su hija, Dulce María Cabezas Velásquez, de 7 meses de nacida, ellos residían en la vereda Providencia, del municipio de Mallama. 
- Diana Arroyo Castillo, residía en Tumaco y era estudiante de la Universidad Nacional.
- Diana Lucia Castro Quiñones, 41 años de edad. 
- Oscar Marcial Velasco, de 24 años de edad.
- Carlos Eduardo Landázuri, 11 años de edad. 
- María Fernanda Abello M.
- Edison Díaz.
- Luz Rocío Moriano Canticús.
- Macario Moriano García.

Levantamiento

Agentes de criminalista de la Sijin de la Policía Nacional y Medicina Legal trasladaron los cadáveres hasta la ciudad de Túquerres, con el fin de efectuar labores de rigor e identificación de cuerpos, para luego entregarse a sus familiares.