La decisión que tomó hoy el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, de asumir de manera provisional las labores de la Asamblea Nacional –que es el encargado de crear las leyes del vecino país y está conformado por las mayorías de la oposición-, ha causado el rechazo, no solo del Gobierno colombiano sino también del mexicano.

“Queremos manifestar la preocupación por la decisión del Tribunal Supremo, acá nosotros hemos insistido – hace dos días en el debate de la OEA-, de la importancia del respeto  y la separación de los poderes como pilar fundamental para la democracia  y en esto reiteramos nuestra profunda preocupación. Creemos que es importante, urgente, que no da tregua, que los venezolanos se sienten a resolver este problema que está llevando al país a una crisis muy grande política, social y económica y que el único camino es que finalmente tomen unas decisiones”, dijo la canciller colombiana, María Ángela Holguín.

“Esto lo único que hace es profundizar aún más esta crisis que vive Venezuela y que reiteramos, rechazamos esta no división de los poderes”, agregó la diplomática, quien ofreció una rueda de prensa en compañía de su homólogo mexicano, Luis Videgaray.

Sobre la situación el canciller dijo: “A México preocupa de manera grave, el deterioro del orden democrático de un país hermano, querido, entrañable para los mexicanos como lo es Venezuela. México es un país que cree en los valores de la democracia, de la democracia representativa, de la división de poderes, y estos hechos no hacen sino agravar lo que ya oí antes de esta situación, era una situación  extraordinariamente delicada”.

El diplomático mexicano afirmó que hacen un llamado para que se resuelvan los problemas con respeto a su propia constitución y que se restablezcan los valores democráticos.

“Seguiremos insistiendo en la Organización de Estados Americanos para que sea la vía del diálogo, un diálogo real, con una ruta de certidumbre la que permita superar esta situación que consideramos grave y reiteramos al pueblo de Venezuela, la voluntad de México y la absoluta disposición para actuar como una nación amiga y hermana”, dijo.

La acción del Tribunal ha sido calificada por la oposición de ese país como un ‘golpe de Estado’, pues el argumento que se usa es que la Asamblea Nacional no cumple con los requisitos para llevar a buen término su misión, por lo cual, el mismo Tribunal se convierte en un parlamento.

Piden evaluar las relaciones con Venezuela

Mientras tanto, desde el Congreso de la República, Mauricio Lizcano, quien lo preside, pidió que se evalué las relaciones con ese país tras la mencionada decisión.

“Desde el Congreso de Colombia rechazo enfáticamente lo sucedido con el parlamento de Venezuela. No es aceptable que en una democracia se cierre el Congreso de la República por un poder judicial, eso parece más una dictadura. Y le pedimos al Gobierno de Colombia que se manifieste y revalúe sus relaciones con Venezuela, toda vez que, aunque no debemos entrometernos en asuntos internos, estas decisiones sí afectan a toda la región y más  temprano que tarde van a afectar a Colombia”, dijo.

Tras la decisión del Tribunal, Perú retiró a su embajador en Venezuela de manera definitiva, como rechazo a la situación.