La Alcaldía de Bucaramanga sorprendió ayer izando por primera vez en la historia de la ciudad la bandera que distingue a la comunidad Lgbti.

El símbolo de la diversidad de género ondeará durante 10 días en el Palacio Municipal, junto a las banderas de Colombia y de Santander, en señal de inclusión social y respeto a las diferencias, según argumentó Manuel Francisco Azuero, profesional de despacho de la Alcaldía de Bucaramanga.

De acuerdo con el funcionario, se trata de un acto simbólico: “Es una bandera en pro de la tolerancia, del respeto a la diversidad en términos de orientación sexual y de género. Estamos enviando un mensaje de inclusión social, un mensaje democrático que encierra de manera pertinente el carácter del Gobierno de los Ciudadanos”.

La iniciativa surge días después de la polémica generada tras las declaraciones de la diputada Ángela Hernández, del partido de La U, quien durante un debate en la Asamblea de Santander expresó que el Ministerio de Educación Nacional adelanta una colonización homosexual en los colegios (haciendo referencia a la Ley 1620).

Sobre esto, Manuel Azuero señaló que “no se puede hablar de colonización homosexual, se tiene que hablar de consolidación de la democracia. La diferencia nos hace seres humanos... Respetar a la comunidad Lgbti, defender los principios de la solidaridad, la tolerancia y el respeto a la diferencia son esfuerzos por la democracia”.

Por su parte, Olga Materón, directora de la fundación Siete Colores Bucaramanga, organización que defiende los derechos de la comunidad Lgbti, sostuvo que “no podemos hablar de una colonización homosexual cuando nosotros somos una minoría. No se puede hablar de que se están vulnerando los derechos de la comunidad heterosexual porque siempre han tenido derechos”.

Al referirse puntualmente sobre las declaraciones de la diputada, afirmó que “ella tiene su postura y es repetable. Se supone que todos podemos dar nuestras opiniones frente a cualquier tema, pero no podemos pasar por encima de los derechos humanos”.

Habla la diputada

Tras conocer el acto simbólico adelantado por parte de la Alcaldía de Bucaramanga, la diputada Ángela Hernández expresó que “el señor Alcalde, un hombre al que yo respeto mucho por su lucha contra la corrupción, está en todo el derecho de tener una postura. Frente a eso no tengo más opiniones”.

Sin embargo, reiteró que “al final, nuestra lucha no es contra la comunidad Lgbti. Nuestra lucha es contra la imposición de esta norma por parte del Ministerio de Educación”.

Así mismo discrepó sobre los argumentos de discriminación que exponen los grupos Lbgti: “Pienso que no hay discriminación, ellos tienen muchos derechos, muchos beneficios... arropándose con la bandera de la discriminación han logrado una gran cantidad de beneficios y privilegios que ninguna otra comunidad del país tiene”.

Hablan concejales de la ciudad

Tras izarse la bandera de los siete colores justo frente a las instalaciones de la Alcaldía de la capital santandereana, el Concejal Jaime Andrés Beltrán, del Partido Liberal, expresó: “si se habla de respaldar las minorías, hay muchas minorías que están siendo discriminadas y no he visto la primera bandera... Si hay una bandera Lgbti hoy en la ciudad, de igual manera debería haber una bandera que apoye los niños, que respalde las negritudes, los indígenas, las comunidades religiosas. Eso es igualdad”.

Por su parte, el concejal Arturo Zambrano, del Centro Democrático, señaló que “no se iza una bandera por una ideología sino mediante una atribución legal, contamos con la Ley 198 de 1995 en el caso de la bandera de Colombia; o la Ordenanza 8 de 2008 para la bandera de Santander... No conocemos un fundamento constitucional, ni acto administrativo por el cual se izó la bandera Lgbti en la Alcaldía”.  

Bucaramanga | Colprensa