Las autoridades investigan si el asesinato del profesor de la Universidad Nacional de Palmira, Manuel Salvador Sánchez, tiene que ver con el homicidio de su hermano Elver Sánchez, registrado el pasado 31 de diciembre en ese mismo municipio.

“Estamos mirando si este caso tiene alguna relación con el crimen del profesor Sánchez, pero por el momento no podemos adelantar nada más, pues todo hace parte de la investigación”, aseguró el capitán Andrés Felipe Cortés Azuero, comandante de la estación de Policía de Palmira, quien dijo que el ataque se presentó en momentos en que el profesor conversaba con el vigilante del barrio.

Dos hombres que se movilizaban en una motocicleta se le acercaron y lo impactaron dos veces en el rostro. Su hijo, que es médico, lo condujo a la clínica Palma Real, donde lo intervinieron, pero falleció hacia las 2:00 a.m. de este jueves.

La Universidad Nacional, sede Palmira, a través de un comunicado, rechazó y condenó el atentado contra el ingeniero agrónomo y magíster en sistemas.

Sánchez Orozco era profesor del Departamento de Ciencias Biológicas de la Facultad de Ciencias Agropecuarias y en sus más de 23 años dedicados al centro de educación superior se desempeñó como líder del grupo de investigación en plantas medicinales, aromáticas y condimentadas. Labor que le mereció diferentes reconocimientos, entre ellos la distinción ‘Investigación Meritoria’, por su invaluable aporte a las ciencias agropecuarias.

En el ejercicio de sus funciones académico-administrativas el profesor Sánchez aportó a la institución como secretario de sede, vicedecano de la facultad de Ciencias Agropecuarias y director de investigación.

“Este abominable crimen es una afrenta contra el sagrado derecho a la vida de un integrante de la comunidad universitaria, que se ha manifestado en contra de todas las formas de violencia y que no renuncia a la misión de contribuir con sectores amplios de la sociedad, a la consolidación de escenarios de paz”, aseguran directivas de la universidad  en el comunicado.

Agregan que las altas calidades humanas del profesor Sánchez Orozco y la dedicación con verdadero sentido de pertenencia a los fines misionales de la institución hacen que este “execrable hecho sea inexplicable, doloroso y muy triste”.

La Universidad Nacional reclamó y exigió a las autoridades competentes emprender todas las acciones que conduzcan a la pronta y ejemplar justicia.