Como un hecho insólito consideran los residentes de la calle La Cuchara del barrio El Pozón, el caso en el que un hombre implicado en una riña, está luchando por su vida, pues ya perdió uno de sus testículos por causa de un balazo que habría recibido del arrendador del apartamento donde vive.

Testigos del hecho aseguran que era la 1:00 de la madrugada cuando Mariano Moreno Pacheco llegó a la casa donde vive arrendado y se sorprendió al ver su cama, juego de comedor y demás cosas en mitad de la calle.

“¿Qué pasó?”, preguntó este hombre, a quien le dijeron que el dueño del lugar donde estaba hospedado le había sacado todo a la calle aduciendo que no le había pagado.

Los vecinos señalaron que en ese momento Mariano salió corriendo hacia la casa del dueño del apartamento, y le reclamó por haberlo sacado. 

“Ellos estaban ahí discutiendo y después fue que comenzó todo”, dijo un residente.

Sacaron armas

Cuando Mariano llegó a la casa del arrendador, después de tratar de arreglar las cosas hablando, el dueño del apartamento entró a su vivienda y salió con un machete en sus manos.

“El señor comenzó a agredir a su inquilino, quien al ver lo que pasaba corrió y cogió unas piedras para defenderse”, comentó un vecino.

Todo indica que cuando Moreno Pacheco tomó las piedras, de la rabia comenzó a lanzárselas al dueño del inmueble, quien al ver esto regresó a su casa. Pero, no lo hizo para resguardarse, sino para salir con un arma de fuego.

Dicen que cuando el arrendador salió con el arma, le habría disparado a Mariano, en dos ocasiones. 

Una de las balas le entró por el muslo izquierdo, perforó uno de sus testículos y se alojó en el muslo derecho. La otra la tiene alojada en la parte derecha del tórax.

Cuando Moreno Pacheco cayó al suelo malherido, su contrincante entró a su casa, salió con el machete y lo remató de cuatro planazos en la espalda. Después huyó.

Se recupera

Los vecinos auxiliaron al hombre herido, quien se desangraba en mitad de la calle. 

Lo llevaron primero al CAP de El Pozón, donde le prestaron los primeros auxilios y de allí fue trasladado a la Clínica Madre Bernarda, donde se recuperaba hasta ayer en la tarde.

Se supo que perdió el testículo y los médicos intentan salvarle la pierna derecha, que estaba bastante comprometida. 
La Policía investiga el hecho y está tras la pista del agresor.