El gobierno de Iván Duque no cederá en su propósito de modificar los acuerdos de paz a los que llegó el gobierno de Juan Manuel Santos, con la entonces guerrilla de las Farc, hoy partido político, en especial en lo referente a la conexidad que se dio a los delitos de rebelión con el de secuestro y narcotráfico. 

Así se lo notificó este lunes el canciller de Colombia, Carlos Holmes Trujillo, a uno de los principales socios que ha tenido el país en materia de paz, la Unión Europea, para lo cual aprovechó su cita con el vicepresidente del Parlamento Europeo, Ramón Valcárcel. 

Lo particular del anuncio de Trujillo es que hace dos semanas, también en Europa, el propio presidente Iván Duque, había descartado la posibilidad de una modificación a los acuerdos. El canciller se encuentra en Bruselas, Bélgica, en gira. 

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Según Trujillo, “he tenido oportunidad de poner en su conocimiento –al vicepresidente Valcárcel- la política del Presidente Duque, con respecto al acuerdo suscrito con las Farcque consiste en implementarlo pero introducirle modificaciones; le he informado también acerca de la posición del Presidente Duque con respecto al Eln, que consiste en exigir la liberación de los secuestrados y en cesar la violencia unilateralmente de manera verificable”. 

En las modificaciones a los acuerdos, explicó que se pedirá que aquellos excombatientes que continúen con actividades relacionadas con tráfico de armas, lavado de activos y narcotráfico pierdan todos los beneficios, como también que la erradicación de cultivos ilícitos tenga un carácter obligatorio de ahora en adelante. 

Igualmente en el encuentro hablaron de la estrategia de Colombia para enfrentar la crisis migratoria con Venezuela, “que consiste en continuar trabajando políticamente y diplomáticamente para crear las condiciones que le permitan al hermano pueblo de Venezuela volver a vivir en democracia y libertad; y con respecto a la crisis migratoria proveniente de Venezuela, he puesto en sus manos, el documento de política pública, recientemente aprobado en Colombia, que define la ruta que seguirá el país en los próximos tres años para hacerle frente a la crisis migratoria proveniente de Venezuela”. 

Por su parte el vicepresidente del Parlamento Europeo sostuvo que “realmente es interesante porque hemos tenido la suerte de disponer de información pertinente, información completísima por parte del señor Canciller y tengo que decirles que para cualquier estado europeo todo lo que aquí se refleja puede ser perfectamente un modelo a seguir”.