Son varias las especies que están amenazadas por las malas prácticas de la minería ilegal o informal en Colombia, y aunque no se debe estigmatizar ese sector de la economía por algunos comportamientos es una realidad que en diferentes regiones del país hay una amenaza para los animales.

La minería ilegal en el país se da en su mayoría en las explotaciones de oro, coltán y hasta uranio y tiene presencia en 12 regiones del país que incluyen 21 departamentos. Entre ellos Antioquia, Chocó, los Santanderes, Amazonas, Cauca, Guainía, Putumayo, Valle, Vichada, Cundinamarca, Sucre, Boyacá, Vaupés, Bolívar, Magdalena, Cesar, Córdoba, Risaralda, Caldas y Caquetá, donde hay un sinnúmero de especies.

Según el brigadier general José Gerardo Acevedo, comandante de la Policía Metropolitana de Medellín, los principales responsables de la minería ilegal en Colombia son las Farc, el Eln y las bandas criminales; como “los Urabeños”, “los Rastrojos” y “la Empresa”, Además la policía sostiene que esta actividad ilícita puede generar hasta 20.000 millones de pesos al año a estos grupos.

Estas son algunas de las especies más amenazadas en el país:

La tortuga gigante

En Acandí, Chocó

La tortuga laúd o caná la más grande conocida en el planeta es amenazada por la extracción de oro en el municipio de Acandí, Chocó. El paso frecuente de las retroexcavadoras por esta zona, declarada santuario nacional, aplasta sus nidos, interrumpe la postura de los huevos y compactan la arena, lo que hace que no puedan salir a la superficie, llegar al mar y ponerse a salvo, indicó Diego Amorocho Llanos, coordinador del programa de especies para América Latina de WWF.

Los jaguares

La Serranía de San Lucas

Los jaguares de la Serranía San Lucas en el Sur de Bolívar y Nordeste antioqueño se ven amenazados por la minería ilegal, que contamina el agua con mercurio y cianuro, además acaba con el hábitat. Además al perder sus presas, muchas veces se ven obligados a atacar al ganado, y esto causa que sean perseguidos por los ganaderos de la región, indicó Esteban Payán, director de Panthera. “Ya hemos encontrado mercurio en jaguares del consumo de babillas y bagre”, indicó.

Rana dorada

Chocó y Cauca

Su belleza iguala al poder de su veneno, capaz de matar a 10.000 ratones. Es igual de grande a una almendra y aunque es altamente letal, incluso para los humanos, no ha podido evitar la muerte de su especie. Esta rana habita en Chocó y está amenazada principalmente por la minería ilegal y la tala ilícita de árboles, que atentan contra su entorno. Oswaldo Cortés de la Fundación ProAves indicó que ellos tratan de preservarla en la Reserva Natural Rana Terribilis, en Cauca.

Los perezosos

Chocó y Amazonas

El perezoso está sufriendo por la destrucción de su hábitat por la minería ilegal. Según datos del Ideam, cada año se destruyen 90.000 hectáreas de bosques naturales donde estos animales habitan, lo que arriesga aún más su existencia. Según Tinka Plese, directora de Aiunau, los perezosos al ser especies arbóreas están afectados por la deforestación y fragmentación de los bosques, en el Chocó y la zona andina donde hay minería ilegal y en el Amazonas.

La nutria gigante

Amazonía y Orinoquía

La nutria gigante es amenazada por la minería ilegal, ya que indirectamente se agotan los recursos pesqueros y las nutrias no tienen con qué alimentarse. La destrucción de los bosques, conlleva además a la erosión del suelo y la disminución de la abundancia de presas. En las zonas de minería de oro, los peces además están contaminados del mercurio. Las zonas más amenazadas son Lobo de Río, Ariraña, Colón en la Amazonía y Perro de Agua en la Orinoquía.

Danta

Amazonía, Andes

Se ve amenazada por la destrucción del hábitat por la minería ilegal que tala bosques y modifica los ríos. El cambio de su hábitat ha diezmado y fragmentado esta especie, y además sufre de la caza de los mineros, indicó Jaime Cabrera de la Universidad Nacional. En la Serranía de San Lucas y en la cuenca amazónica Guainía, Putumayo, Amazonas, y en las selvas bajas de Colombia en los ríos Cauca y Magdalena. Tiene presencia en Chocó y Antioquia.

Armadillo

Amazonía y Orinoquía

Aunque en un tiempo fueron muy cazados, en la actualidad la principal amenaza del armadillo es la deforestación y la expansión de la minería ilegal, que lo obligan a migrar a lugares en los que no sabe cómo vivir. Así mismo vive cerca de los ríos que son tan impactados por la minería ilegal. Según Tinka Plese, directora Aiunau, el armadillo es otro animal afectado por la deforestación y la fragmentación de los bosques en la Orinoquia y en la selva de la Amazonía.

El cocodrilo

Orinoquía

El cocodrilo del Orinoco está en peligro crítico de extinción. Hoy día en Colombia se considera casi extinto. Y una de las amenazas es la destrucción del hábitat por malas prácticas mineras, que han llevado a la contaminación de sus aguas y la reducción de sus espacios. Alejandro Olaya, director de Palmarito Casanare indicó que es la especie en mayor peligro de extinción en Colombia; “no quedan más de 200 en libertad”.

El delfín rosado

Amazonía y Orinoquía

El delfín rosado es un delfín de río considerado vulnerable. Se le encuentra en el río Amazonas, en la cuenca del Orinoco, incluyendo los río Apure y Meta. Los metales pesados como por ejemplo el mercurio usado en las minas de oro para separarlo de la piedra, constituye una seria amenaza para esta especie que se encuentra en la cúspide de la cadena alimenticia.

Los loros andinos

Cordillera Central

Los loros andinos de la Cordillera Central como el loro orejiamarillo y el loro coroniazul han sido amenazados por la minería ilegal en los departamentos de Tolima y Risaralda, según indicó Oswaldo Cortés de ProAves. “En estos lugares hay mucha explotación de oro, donde remueven los bosques. En la zona de Timbiquí en el Cauca y algunas aves del Chocó como la Oropendo en Baudó, también se ven amenazadas por la minería con dragas que remueven los ríos” aseguró.

*Medellín, El Colombiano | Colprensa