Las constantes denuncias de Luis Hernando Pineda, presidente de junta de la Primera Etapa de Atalaya y líderes comunales del sector tuvieron  hicieron que la Contraloría pusiera sus ojos en el Club del Adulto Mayor de la ciudadela Juan Atalaya.

Tras una serie de inspecciones y evaluaciones en los contratos de obras que se adelantaron entre 2011 y 2012, la Contraloría le exigió al municipio responder por una serie de irregularidades en estos contratos, y gestionar un plan de acción que permita la reapertura del club.

Sin embargo, a la fecha la alcaldía no ha dado una respuesta concreta sobre avances en esta obra, pese a que se le estipuló un plazo de 10 días para hacerlo.

A mediados de marzo, Mario Pezzoti, secretario de Bienestar Social, dijo a La Opinión que esta secretaría había pasado un informe a la de Infraestructura sobre los problemas físicos que presentaba la estructura del club,a fin que esta hiciera una evaluación técnica y se proyectarán las reparaciones.

Diez meses atrás, se había hablado de esta inspección, pero el lugar siguió con las puertas cerradas, la piscina vacía por las fisuras y los pisos agrietados.

En esta ocasión el alcalde se refirió al respecto. Aunque no habló sobre porqué en los últimos tres años no se ha hecho nada por rehabilitar este espacio, declaró que su oficina jurídica está trabajando en el informe de evaluación especial de los convenios de asociación N° 1146 del 5 de diciembre de 2011, y el 1185 del 2012, a petición de la Contraloría.

“Dimos inicio al  trámite administrativo para determinar la viabilidad de efectuar las pólizas del cumplimiento, a fin de desvirtuar y justificar presuntos hallazgos y garantizar la estabilidad de las obras”, dijo Ramírez.

Sin embargo, en el documento de evaluación del proceso del club, la Contraloría hace alusión a que estas pólizas se vencieron en junio del 2013.

El alcalde dijo que una a vez concluya el trámite se efectuarán las decisiones correspondientes para la habilitación de este espacio.