Murciélago artibeus cinereus. Este animal fue fotografiado en 2008. / Foto: Hernani Oliveira, National Geographic

Erizo albino. Este mamífero cubierto de púas expresa ternura, ¿no creen? / Foto: Kangkung Malaya | National Geographic

Caimán albino. Especie poco común, el mostrado en esta imagen nada en el Zoológico Audubon de Nueva Orleáns. Estos caimanes blancos no se adaptan muy bien al medio salvaje debido a que su piel ofrece muy poca protección contra el sol. / Foto: Joel Sartore | National Geographic

Ualabí albino y su cría. Aunque pertenece a la misma familia y se parece un canguro no lo es por su escasa estatura. El ualabí es miembro del género Macropus y existen alrededor de 30 especies diferentes. / Foto: Ingrid Van Streepen | National Geographic

Pingüino albino. La fotografía de este animal se hizo en la Antártida. / Foto: Timothy Filer |National Geographic

Un ciervo de cola blanca albino en Wisconsin, Estados Unidos, retratado en 2012. / Foto: Matthew Crowley | National Geographic

Gorila albino. Esta animal nació salvaje en Guinea Ecuatorial en 1964 y vivió la mayor parte de sus 39 años en el Zoológico de Barcelona, España, donde una prueba reveló que su mutación única era consecuencia de la consanguinidad que implicó un gorila hembra y un varón que resultó ser su tío. Fue bautizado como ‘Copito de nieve’ y fue el único gorila albino occidental documentado en la historia de la biología. / Foto: Upsocl.com

Cuervo albino. Es común ver a este animal de color negro, pero también está su contraparte: el blanco, por la falta de melanina. / Foto: Upsocl.com

Pavo real albino. El cruce de un pavo real común con un pavo real blanco ha formado las primeras generaciones de pavos reales que contienen oculto el factor del albinismo. / Foto: Upsocl.com

Langosta albina. Es sorprendente conseguir un ejemplo albino de esta especie. Las langosta albinas se esconden muy bien en las profundidades del océano. / Foto: Upsocl.com

Ballena jorobada albina. Los mamíferos marinos albinos no son del todo desconocidos en la literatura gracias a la leyenda de Moby Dick, la gran ballena blanca. Ésta es una ballena jorobada de 14 metros, vista por primera vez en la costa de Queensland, en Australia, en 1991. / Foto: Upsocl.com