La Villa de los Caro en las últimas décadas se ha caracterizado por ser uno de los sectores más afectados por la violencia. Históricamente en esta tierra la lucha de los líderes ha sido incansable y peligrosa.
Judith y Érika Caselles son parte de estas líderes que han luchado pese a los obstáculos defendiendo en este caso a la comunidad LGTBI.
Durante el 2019, en Ocaña se llevaron a cabo talleres para unir estos grupos de líderes, especialmente para fortalecer a las mujeres.
Para Jazmín Jaime Bayona, coordinadora de la oficina de la Mujer y la Familia, la finalidad de estos talleres es "fortalecer a las mujeres en el ámbito político y social pra que se empoderen y puedan trabajar más por las mujeres de nuestra región", además recalcó que con esto se busca mejorar la calidad de vida de las mujeres de Ocaña a fin de buscar la satisfacción.
Después de estas capacitaciones Elvira Hoyos, participante, aseguró que en ocasiones la mujer se siente vulnerada porque es poca su participación en ámbitos como la política, sin embargo, eso también hace parte de la cultura machista.
"Nosotras tenemos las virtudes, cualidades y capacidades para asumir el liderazgo en nuestra región. Además podemos ocupar puestos y cargos políticos importantes", aseguró la mujer.
Durante un encuentro de madres líderes de la región, el alcalde encargado de Ocaña recordó que "es importante incentivar a quienes sin ninguna remuneración trabajan por el bienestar de la comunidad y son un puente para canalizar las acciones institucionales”.
Por eso, el Pnud y La Opinión, por medio de la estrategia #SusVoces, quieren reconocer esta labor incansable de los líderes y visibilizar su trabajo, para que todos los nortesantandereanos reconozcan este esfuerzy apoyen sus ideales para hacer de su entorno un mejor lugar.
Cabe recordar que según la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, 441 ataques se registraron a líderes sociales, incluyendo 121 asesinatos en 2017. Estos asesinatos incluyen a 84 defensores, 23 miembros de movimientos sociales políticos y 14 muertes de personas durante protestas sociales. Dicha situación se agravó durante el 2019 en Colombia, donde se registraron alrededor de 300 asesinatos a líderes.
“Cuando matan un líder o lo amenazan es como si estuvieran amenazando a toda una comunidad, están afectando los sueños de una comunidad, su esperanza, el futuro de una comunidad que está representada en esa persona que está soñando con un futuro diferente", aseguró Paula Gaviria a ColombiaCheck, en una investigación hecha por este medio sobre la importancia de los líderes sociales.
Para finalizar, es importante mencionar que aunque han sido muchas las voces silenciadas, aún permanecen activas miles de ellas que quieren ser escuchadas y apoyadas. Pese al peligro, continuarán su lucha en sus territorios, en busca del bienestar de sus comunidades.
