“Cúcuta, Norte de Santander, tiene que conectarse con el resto del país. –La región- no puede continuar aislada”. Estas fueron las primeras palabras del presidente Juan Manuel Santos, luego de firmar, ayer sábado, el contrato de la autopista 4G Cúcuta-Pamplona, proyecto que comprende la ampliación de esa importante carretera.
El acto protocolar se realizó a las 12:00 del mediodía, en el sector conocido como la Vuelta de los Adioses, en la entrada a Pamplona, a donde llegó el mandatario conduciendo un vehículo y en donde después disfrutó de unos pasteles, pues entró a uno de los restaurantes a merendar.
Durante su intervención, Santos dijo que esta obra va a transformar radicalmente la movilidad de los colombianos entre Cúcuta, Pamplona, Bucaramanga y el resto el país, y traerá desarrollo para el departamento por el tiempo de recorrido que se ahorra, la competitividad en económica que se adquiere y la conectividad que tendrá Norte de Santander.
“Es una obra que completa un sueño que tenía la infraestructura colombiana, que teníamos lo colombianos, de conectar con buenas carreteras todo el país, desde Ecuador hasta Venezuela. Lo que faltaba era este trayecto; hace un año firmamos el acta de inicio entre Pamplona y Bucaramanga”, agregó.
El mandatario enfatizó que el proyecto va a tener una inversión inicial de 1,5 billones de pesos, otros 500 mil millones de pesos en operaciones y financiación a través de las vigencias futuras, por lo que el monto total ascenderá a 3,8 billones.
Igualmente, Santos resaltó que la construcción de la doble calzada generará cerca de 4 mil empleos y tendrá un plazo de duración de cinco años, por lo la empresa española Sacyr, ganadora de la licitación, debe entregar la vía en 2022.
Peaje cerca a Pamplonita
Algunos habitantes de Pamplona se acercaron para saludar y conversar con el presidente.
El ministro de Transporte, Jorge Eduardo Rojas, manifestó que la vía “va a quedar totalmente en doble calzada” y el tramo desde Cúcuta hasta el peaje Los Acacios, que ya es de doble calzada, será rehabilitado.
El proyecto contempla la construcción de la variante de Pamplona, de 4 kilómetros.
Rojas además aclaró que tienen planificado la creación de un segundo peaje cerca de Pamplonita, “pero cuando se termine la obra y con valor diferencial, para Pamplona y Pamplonita, de $6.000”. “Hoy existe un peaje que vale $5.800, ese peaje no se va a incrementar”, puntualizó.
Para el presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, los colombianos, en especial los nortesantandereanos, reciben “una excelente noticia”, debido a que esta autopista de cuarta generación (4G) reactivará la economía de la región.
El alcance del proyecto definió la construcción de seis túneles y 44 puentes, dos túneles que tendrán una longitud superior a 1 kilómetro serán de obligatoria ejecución, con lo cual se permite al concesionario analizar nuevas alternativas de trazado que puedan cumplir con la velocidad de diseño planteada, estimada en 60 kilómetros por hora.
Al concluir los trabajos, la vía Cúcuta-Pamplona, que en la actualidad está en mal estado, tendrá una rehabilitación completa y quedará totalmente señalizada.
Leopoldo Pellón, representante de la compañía que tendrá a cargo la ejecución de la doble calzada, la firma española Sacyr Concesiones Colombia SAS, garantizó el cumplimiento del lapso estipulado para la obra.
“Nosotros trabajamos para hacer honor a esos compromisos. En todos los contratos que tenemos en Colombia, que son bastantes, se han cumplido los plazos y entregado las obras”, recalcó.
Infraestructura para el “desarrollo sostenible”
Uno de los más complacidos con la firma del contrato es el gobernador William Villamizar, quien afirmó que ese proyecto es un gran factor de desarrollo y cumple un anhelo de la región: “tener vías como las del resto del país”.
“Esta infraestructura ayuda generar empleo, a reivindicar a Norte de Santander en la parte socioeconómica y permite avanzar, especialmente, en lograr ese desarrollo sostenible que buscamos. Dado que ya no tenemos conexión con Venezuela para nuestras empresas, qué bueno tener esa conexión con el interior del país”.
Además del gobernador, también acompañaron al presidente Santos el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas; el senador Manuel Guillermo Mora, el alcalde de Pamplona, Ronald Contreras; el vicepresidente de Estructuración de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Camilo Jaramillo, otras autoridades y vecinos de la zona.
“Me pueden insultar todo lo que quieran”
El presidente Juan Manuel Santos también habló sobre los últimos acontecimientos ocurridos en Venezuela como las críticas contra él de parte de su homólogo Nicolás Maduro y el otorgamiento de casa por cárcel a líder opositor Leopoldo López, considerado preso político.
Sobre la situación de López, Santos celebró que el dirigente esté de nuevo con su familia e insistió que se debe perseverar en la búsqueda de “una solución negociada y pacífica para los problemas de Venezuela”, pues es un clamor de América Latina.
Respecto a las ofensas de Maduro y quien recientemente dijo que Santos debía inclinarse ante él y pedirle la bendición, porque era su padre, el mandatario colombiano solo respondió: “a mí me pueden insultar todo lo que quieran, personalmente, no me importa, pero que no insulten al pueblo colombiano”.