“No se hagan los ciegos y colaboren con el arreglo del caño”, se puede leer en la entrada del asentamiento Villa Paz, ubicado en la ciudadela Juan Atalaya.
Con esta sutil invitación, los líderes comunitarios invitan a sus vecinos a unir esfuerzos para poder construir un puente de concreto para cruzar con mayor facilidad el caño que atraviesa este sector, el mismo que se desborda cada vez que llueve.
En la tienda de Alicia Aguilar, el sitio de acopio, se reciben monedas incluso de la denominación más baja. Lo importante es aportar. Hasta ayer llevaban 100 mil pesos, menos del 5 por ciento de los recursos que necesitan para la obra.
Daniel Ortiz, líder comunitario, aseguró que los vecinos decidieron tomar las riendas de la situación, al no tener respuesta municipal.
“El año pasado, un niño que jugaba fútbol cerca al caño se cayó a las aguas negras al intentar recoger un balón, y estuvo hospitalizado tres meses, porque ingirió esas aguas”, relató el líder.
La semana pasada, una pareja de motorizados resbaló y cayó al caño, y un par de días atrás, unos niños que salían de la sede Guadalupe, también estuvieron a punto de ser arrastrados por el desbordado caño.
“No queremos que haya más víctimas del caño. Esta vía es paso obligado hacia Gualadupe y La Conquista, por lo que recurrimos a la solidaridad de estos sectores”, agregó Aguilar.
La mujer aseguró que pese a que esta situación fue puesta en conocimiento de la secretaría de Infraestructura del Municipio, no les han prestado atención, porque están en terrenos que no han sido legalizados.
Por esta razón, la comunidad se volcó este fin de semana a iniciar las obras por sus propios medios. Con picas y palas empezaron a darle forma al barro.
“Estamos varados por 20 bolsas de cemento. Ya tenemos unas carretillas de tierra, pero aún nos faltan materiales”, indicó Ortiz.
Los vecinos temen quedar incomunicados con Camilo Daza, puesto que el caño crece cada día más, dejando al descubierto la tubería del acueducto.
Por otro lado, María Belén Palacio, presidenta de Crispín Durán parte baja, el barrio vecino, dijo que la junta de este sector también le ofició a Infraestructura sobre esta fétido y peligrosa situación.
“El secretario Yonny Pascual Contreras se comprometió en ayudarnos. Él ya sabe de esta situación y estámos esperando que nos de una solución”, indicó.