Existen diferentes tipos de intermediarios o tramitadores, a los que en algún momento todos hemos acudido por afán o por desconocimiento.
En muchas ocasiones hacen funciones especializadas y segmentadas, dependiendo del proceso y la entidad con la que se debe hacer el trámite.
Sin embargo, es común que se aprovechen de sus clientes para sacar un porcentaje de su dinero, así el trámite sea gratuito.
Por ejemplo, para sacar el sisbén, el fosyga, retirar sus cesantías o cobrar pólizas del SOAT no necesita de un tercero.
En este sentido, es importante que se informe acerca de cómo se hace el trámite y que este no necesita de intermediarios, para mediar ante las diferentes entidades.
Más allá de la pérdida de dinero, hay otros riesgos a los que se expone si acude a estas personas inescrupulosas, que esta vez, en ‘No Coma Cuento’ le enseñamos.