Las estafas a través de redes sociales y plataformas aumentaron durante el aislamiento preventivo por la COVID-19, debido a la necesidad imperiosa de usar estas herramientas de comunicación para mantener contacto con otras personas e intentar llevar el curso de la vida a pesar de la crisis da salud pública.
Según cifras del Centro Cibernético de la Policía Nacional, los delitos informáticos crecieron 59% en el primer semestre de 2020, respecto al mismo periodo del año pasado.
Existen múltiples modalidades de estafas, entre ellas la falsa encomienda internacional, la cual consiste en suplantar algún familiar o conocido de la víctima que se encuentre en fuera del país, esto sucede al no usar los seguros de acceso a la información personal que ofrecen las redes sociales o plataformas.
También está el fraude bancario, uno de los más antiguos trucos. Se trata de la extracción de los datos personales del incauto, por medio de llamadas telefónicas para vaciar todas sus cuentas bancarias.
Y finalmente, el fraude mayormente replicado en redes, el cual La Opinión les trae en este capítulo de ‘No coma cuento’ es la la venta de dólares vía redes sociales, elaborada minuciosamente por ciberdelincuentes especializados en perfilar a su víctima y robar la identidad de alguien allegado para ofrecer servicios fraudulentos a través de venta de dólares.
Preste atención a los consejos que La Opinión le trae en este artículo.
