Los conductores borrachos son los que más duro han pagado por violar la Ley de Tránsito.
Así queda al descubierto al cumplirse el cuarto día de la presencia del Grupo Élite de Tránsito en Cúcuta, en una estrategia que busca poner orden en las vías de la capital nortesantandereana.
En las intervenciones adelantadas en los 28 puntos críticos por accidentalidad, se han inmovilizado 587 vehículos, 39 de ellos de conductores que manejaban borrachos.
Esta cifra de ebrios se dio durante el fin de semana y no tiene precedentes en la ciudad. “Incluso, ni Bogotá registra una cifra de estas en un solo fin de semana, lo que deja en evidencia el total desconocimiento de la ley", dijo el comandante de la policía de Tránsito, mayor Félix Clavijo.
Hasta ayer se llevaban aplicados 2 mil 400 comparendos, hecho que también deja al descubierto el mal comportamiento de los conductores en las vías.
Este motivo dio pie para que la alcaldía solicitará por más días en Cúcuta la presencia del Grupo Élite, que inicialmente estaba prevista hasta este 13 de octubre.