Colombia realizó la Segunda Jornada Nacional de Vacunación y celebró el 18º aniversario de la Semana de Vacunación en las Américas (SVA), del 25 de abril al 2 de mayo.
Esta ha sido una de las iniciativas, que con sus actividades de vacunación, “alcanzan a poblaciones de difícil acceso”, como lo son las comunidades que viven en zonas rurales o fronterizas.
Andrés Felipe Arias, médico pediatra y especialista en Infectología, quien presta sus servicios en el Hospital Universitario Erasmo Meoz (Huem) y la Clínica Medical Duarte, habla con La Opinión sobre la importancia de la vacunación en niños y adultos, en época de pandemia.
Según Arias, pese al aislamiento social obligatorio decretado para contener la propagación del coronavirus, es fundamental mantener el esquema de inmunización, porque hay unas enfermedades que se pueden prevenir de esta manera; el hecho de no suministrar las vacunas representa el riesgo de contraer estas patologías, como por ejemplo brotes de sarampión.
“Pudiéramos también tener un deterioro en la meta en la erradicación de la poliomielitis, las Américas están libre de esta patología; presentar más enfermedades invasivas potencialmente mortales, como las que causa el neumococo; o cuadros de diarrea muy graves, como el rotavirus”.
El médico infectólogo agregó que no se debe suspender la vacunación en dos grupos poblacionales de riesgo: todo menor de 5 años, principalmente menores de 18 meses; y adultos mayores, quienes en medio de la pandemia de COVID-19 tienen doble riesgo.
De acuerdo con el galeno, una de las vacunas que se les debe administrar a los abuelos es la de la antiinfluenza, que se debe administrar todos los años, la cual también requiere colocársela al quienes conviven con ellos.
Adicionalmente, las inmunizaciones que combaten la tos ferina y el neumococo.
“Independiente de haber tenido varicela, es común que nuestros abuelos presenten el cuadro famosos de la culebrilla, lo que llamamos herpes zóster. Más allá del mito de que si la cabeza se une con la cola se muere la persona, lo importante es entender que una vez la culebrilla pasa deja algo que se llama la neuralgia postherpética o un dolor en el nervio que afectó, que pude ser muy limitante. La vacuna entonces previene el zóster”.
El esquema colombiano es uno de los más completos de los países de las Américas, y cuenta con 21 vacunas gratuitas que protegen contra 26 enfermedades altamente transmisibles como: la poliomielitis, tuberculosis, hepatitis B y A, difteria, tétanos, tos ferina, e infecciones causadas por haemophilus influenza tipo b y neumococo, sarampión, rubéola, paperas, varicela, fiebre amarilla, diarreas causadas por rotavirus e influenza estacional.
